El Monstruo

El Monstruo-nombre que perduró en la memoria de la ciudad-era un cefalópodo tentacular con capacidad de generar campos de energía negativa. Su primera incursión conocida data de 1966, cuando emergió desde la laguna del parque O´higgins, lo que hizo suponer que era un anfibio poco adaptado a la vida terrestre. Nunca se olvidará su cuerpo elipsoide cubierto por una capa gelatinosa de batracios en estado larval, ni el sonido de su grito, que fue escuchado incluso en Melipilla.

Su segunda incursión, en 1978, es una de las más recordadas, al ser la del ataque al parque de entretenciones Fantasilandia, recién inaugurado. Se cree que se sintió amenazado por la figura del Pulpo mecánico, una de sus atracciones más llamativas y que destruyó por completo, matando a más de treinta personas antes de volver a sumergirse en la laguna, la que a partir de ese día estuvo clausurada y con vigilancia policial. El alcalde Mekis sugirió el traslado de Fantasilandia a terrenos más seguros, pero su propuesta fue ignorada. Tres años mas tarde, El Monstruo atacó de nuevo, pero

Esta vez irrumpiendo por los túneles de la línea Dos del metro. Resultado, un promedio de doscientos muertos, y millones de pesos en pérdidas. Buzos tácticos del GOPE se sumergieron en la laguna del parque, con el propósito de colocar explosivos en la guarida del Monstruo. A los 5 metros la visibilidad era nula, y la profundidad de los conductos naturales encontrados fue simplemente imposible de medir. Los explosivos se hicieron estallar prematuramente, matando a un par de patos silvestres y a un curioso que se acercó demasiado.

En la próxima década, El Monstruo atacaría constantemente. Se elucubraron cientos de teorías que intentaban explicar el fenómeno, ninguna de ellas convincentes y la mayoría ininteligibles. Santiago empezó a acostumbrarse y a tolerar la pálida figura y los tentáculos con ventosas dentadas del cefalópodo gigante, que terminó siendo aceptada definitivamente después que atacara al móvil de un canal de TV, en el cual resultó muerto el conocido Profesor Rossa, una de las figuras mas detestadas de la farándula santiaguina.

El Monstruo se enfrentaría en numerosas ocasiones a Gojira, a Motrah y a otras criaturas resultantes de la carrera nuclear de la región.

imagen: Fotografía Polaroid de la primera salida del Monstruo, 1966.

Gaspar, mi perro

Gaspar, mi perro, se mueve soñoliento hacia mí cuando me ve. Estoy en el cambio de guardia y sabe que le traigo su colación nocturna. Sáez me dice que no se siente muy bien y que si sigue así habrá que llevarlo al veterinario. Ya hicimos la colecta y nos pusimos todos, solo faltó el sargento Humeres que nunca le ha tenido gran cariño. Mueve la cola y aprieta el paso en la noche hasta que alcanza su plato.


Gaspar apareció hace un par de años, igualmente crecido como ahora y de raza indefinida. Eso fue para la inauguración de la Plaza del Nuevo Ciudadano y decidió quedarse. Total, es un sitio amplio y lleno de esquinas donde un perro se puede meter en invierno y correr en primavera. Antes había aquí un centro de convenciones que con el tiempo se volvió obsoleto y costoso, así que lo demolieron y construyeron un centro cultural debajo. No tocaron el edificio de la Secretaría de la Cultura.

Yo llevo más años que el perro. He visto dos gobiernos y soy afortunado de tener esta destinación tan piola. Tengo traje de gala, regular y de invierno. Por acá he saludado a Allende, Frei, Altamirano, todos expresidentes. Una vez vino el viejo Lawner antes de morirse y le di un apretón de manos. Me conversó que para él fue como esperar un hijo inmenso, de concreto y acero hecho por mil chilenos en una época que fue el canto de cisne de las ideas.

Gaspar es amistoso y sumiso, pero celoso de su territorio. Tal vez eso explique que los otros perros solo pasen por la vereda de la Alameda y no ingresen en la explanada. Siempre lo veo recorriendo o recibiendo la palmadita de una gringa con la cola entre las piernas, siempre oliscando de lejos los extraños. La verdad es que el perro es desconfiado y solo se da con las guardias. De hecho, Gaspar no duerme, dormita.

Hay veces en que no aparece por dos o tres días. Las primeras nos volvimos loco buscándolo y hasta nos fuimos de franco para ver en las calles si lo veíamos en medio de una leva. Ni por Villavicencio ni José Victorino Lastarria. Llegábamos hasta el Parque Forestal o el Santa Lucía. Hasta creamos una red de apoyo con los vecinos de alrededor del Gabriela Mistral. Nada; al perro se lo traga la tierra. Cuando estamos por desesperar –porque es como un juego, el primero que desespera pierde-, aparece y siempre soy yo el que lo divisa primero. Siempre del lado este, siempre en mi guardia, siempre a las cuatro de la mañana. Machucado, flaco, con mal ánimo, me alcanza y se echa sobre mis botas. Se queda quieto y yo sin poder abrazarlo le digo palabras reconfortantes y le cuento lo que se ha perdido en esos días. Llega la mañana y el cambio de guardia, la noticia es general. Me voy a la casa contento a dormir.

Nunca he ido abajo, al centro cultural. Como que no se me da. Pero a Gaspar sí, aunque no entienda nada en el Museo de la Solidaridad. Debe ser el único perro en Chile al que le permiten pasearse por el centro cultural y echarse debajo de una pintura. Eso de sus desapariciones, me obsesionó en algún momento. Verlo siempre llegar por el mismo lado me llevó a una exclusa cerrada, perpendicular al suelo. En ese momento no pude sacar ninguna conclusión, pero luego me enteré que la exclusa funcionaría como desagüe y a último momento decidieron alterar el plano de aguaslluvias y clausurarla. Seguramente lleva a otra parte del complejo igualmente poco interesante y no hay ninguna conexión con Gaspar.

La última vez, el perro se perdió diez días. Desapareció el 5 de marzo de 2006. Como siempre, fuimos a buscarlo. Nos comenzamos a quedar mudos al sexto. Hasta a Humeres se le reblandeció el corazón y le daba grima vernos a todos en ese estado, y terminó donando cinco mil pesos para el fondo. Fui el último que perdió la ilusión y lo esperé todas esas noches mirando hacia la exclusa del este, a las cuatro de la madrugada. El día octavo comencé a aceptar la idea de que Gaspar no iba a volver. Me lo imaginé muerto al borde de la calle o en la perrera. El día noveno nos conseguimos que el trompeta se pegara un pique a la guardia de la noche. Usé mi traje de gala. Nos formamos todos y presentamos armas en el más completo silencio. Rompimos filas y me juré que no iba a volver a hablar sobre el asunto. A las cuatro de la madrugada del décimo día, Gaspar apareció por el este. Había mucha niebla pero tenía la vista fija en la exclusa. La sensación más clara es que la “atravesó” en un tufo de nube. Corrió espantado hacia mí, la cola entre las piernas. Yo también corrí, y cuando me vieron los otros hubo una estampida general y Humeres se volvió loco gritándonos. Estábamos más allá de eso. Nos juntamos en medio de la explanada y todo era un caos de órdenes y contraórdenes. Yo me preocupé únicamente de revisarlo y palparlo. Olía a humo y cenizas, una parte del lomo estaba chamuscada pero no parecía herido; tenía una mirada huidiza y después hundió la cabeza en mi pecho. No podía estar seguro de nada. Alguien se sacó la chaqueta de servicio y lo arropamos, corrimos con él hasta una clínica veterinario. Humeres nos siguió haciéndose el enojado. El médico de turno dijo que, aparte de las quemaduras, estaba bien, con un poco de inflamación en las vías respiratorias, y que ahora lo único que necesitaba era mucho descanso. Nos preguntó si lo habíamos rescatado de un incendio. “No”. Era más complicado que eso. Me lo llevé a la casa un par de días. La noche siguiente me acerqué a la exclusa y le di un par de patadas de prueba y parecía tan sólida como siempre. No había marcas nuevas, nada. Cuando la toqué estaba caliente.

Gaspar no ha vuelto a hacer su magnífico acto de desaparición. Lo que hacía cuando no estaba parecía darle un equilibrio. Me engaño diciendo que quizás es solo añorar a alguna perra, pero diría que se nota más triste. Dos veces lo he pillado raspando con la pata delantera la exclusa. Insiste por largos minutos. Luego me va a buscar y con una típica mirada de perro callejero se pone a gemir. Me apoyo en una rodilla y le tomo la cabeza. Le pregunto “¿qué?” y me hundo en esos ojos tratando de entender. Pero no puedo. Se echa sobre mis botas y el resto de la noche dormita. ¿Qué busca, qué? ¿El aire frío del otoño le hace daño, tan viejo puede estar? Busca volver a un sitio con sol, podría ser que sea hora que me lo lleve a la casa. Y Gaspar dormita, ¿sueña que abre una puerta hacia al verano?

Mi perro Gaspar atraviesa el sueño en estado de vigilia.

Eternauta

(Reuters) 1 de octubre 1973. Siguiendo los pasos de San Martín, el creador de El Eternauta y militante de la guerrilla Montoneros, H.G. Oesterheld, cruzó la cordillera el jueves pasado liderando un ejército de eternautas armados —con sus antifaces acuáticos y tanques de oxígeno— para unirse a sus hermanos de la resistencia chilena. Ni bien supo de la invasión de los mecanoides militares (el pasado 11 de septiembre), juntó su ejército y avanzó hacia Santiago para luchar contra los androides.
Esta mañana la resistencia comunicó que el héroe guerrillero fue capturado por los mecanoides. Sus seguidores guardan silencio. Entienden que no volverá.
El genio ha desaparecido en la eternidad. La lucha sigue.

Arauco


Luego de 7 nominaciones al Oscar y un éxito de taquilla abrumador, llega al DVD la edición especial de Arauco, el film que transformo al chileno Mauricio Llancaqueo en una estrella mundial.

La trama -para quienes no vieron la película- visita la relación histórica entre el conquistador español Pedro de Valdivia (Jeremy Irons) y su sirviente guerrero, interpretado magistralmente por Llancaqueo.

A partir del encuentro y contraste entre estos dos personajes, Ridley Scott desarrolla una historia que sondea las profundidades de la traición y el honor en múltiples niveles, siempre dentro de una atmósfera densa y extrañamente intima que nos recuerda a lo mejor del director en Blade Runner.

Asistido por un espléndido y premiado guión -de la chilena Toncy Dunlop- Ridley Scott logra en 145 minutos crear una especie de alegoría, o mas aun, una imagen poderosa y honesta, no exenta de épica, sobre el quiebre trágico producido por el encuentro de dos mundos.

Es quizás ese el mayor éxito del film: contar la historia sin demasiado respeto con la historia, o mejor dicho, sin depender de los manuales o las enciclopedias. Lejos de ser una película sobre la conquista, es una película sobre las pequeñas tragedias, el sentido del deber y el amor sangrante.

Laboriosamente, pareciese que el director se desprende del efectismo que caracterizo a sus últimos trabajos, y termina construyendo con cuidado, como un artesano, la historia de una América trágica y en perpetua búsqueda de su redención.

En esta edición especial en DVD, podrán encontrar ademas de los comentarios del director y escenas detrás de las cámaras, un interesante documental sobre Lautaro con la voz de Sigourney Weaver, quien interpreta a Inés de Suárez en la cinta.

Arauco mas que recomendable, es necesaria como ejercicio no solo de memoria histórica nacional, sino que como un gran estudio acerca de la tragedia que llevamos dentro. O como dice Lautaro en el film, «Nuestra sangre nos comanda«.

Mortis vive!


El Siniestro Doctor Mortis Volvió a atacar la noche del lunes pasado, según las declaraciones iniciales del jefe de la BH. De nada sirvieron los escudos de distorsión lucífera, ni las plegarias en latín de los guardias que vigilaban los accesos del Instituto Médico Legal.

Las pesquisas señalan que Mortis habría revivido los cadáveres de los generales Pinochet y Contreras, ambos muertos por un comando suicida de la Vanguardia Organizada Del Pueblo. En Investigaciones han declarado que los motivos detrás de esta acción no están del todo claros.
Se recordará que Mortis revivió los restos mortales de Alessandri, con lo cual el fallecido ex-presidente pudo reinstalarse en el poder. La creación de un ejército zombi se enfrentó con el total rechazo de la iglesia, cuestión que se definió con el enfrentamiento entre Mortis y el Cardenal Caro en los techos de la Catedral de Santiago. A pesar de la intervención de Alessandri, Mortis fue confinado en una celda en el subsuelo del terreno en el que se empezaría a construir el templo votivo de Maipú, lugar del que escaparía cinco años después.

Alessandri terminó encerrado en el Open Door, a instancias del Colegio Médico. Nadie aguantaba su olor a muerto ni su cuerpo que se caía a pedazos.

(Revista Vea, octubre de 1972)

Tractatus Zone (Episode 2)

Después de cumplir una condena relativamente corta en la Penitenciaría de Punta Arenas, Serling y Wittgenstein fueron liberados en octubre de 1959. Decidieron abandonar sus ambiciones de dominación mundial para dedicarse a la difusión de un texto escrito por Wittgenstein durante su encarcelamiento. El texto se titulaba Tractatus Silentium. El fragmento más relevante es el que se aproxima a los negativos epistémicos y las periferias cognitivas. Este es su contenido:

Negativos epistémicos y periferias cognitivas

1.1 La cognición resulta de negativos epistémicos.
1.2 Los negativos epistémicos resultan de una visión periférica de tipo cognitiva.
1.3 Las cosas no se pueden cognizar de forma directa.
1.4 Las cosas son la construcción de su periferia.
1.5 Las cosas son negativos epistémicos.
1.6 Nada se puede aseverar de forma directa sobre los negativos epistémicos.
1.7 Nada se puede aseverar de forma directa sobre las cosas.

2.1 La periferia cognitiva se desplaza al desplazarse el objetivo cognitivo.
2.2 La selección de los objetivos cognitivos es el resultado de sus periferias.
2.3 Intentos de cognición directa de periferias resulta en el desplazamiento del objetivo cognitivo.
2.4 Semejante desplazamiento anula la cognición directa de periferias.
2.5 Periferias funcionan periféricamente.
2.6 Periferias no pueden funcionar como objetos de cognición directa.

3.1 El lenguaje puede ser parte de una periferia.
3.2 El lenguaje puede ser una construcción de su periferia.
3.3 Como tal, el lenguaje resulta de un negativo epistémico.
3.4 El lenguaje también contribuye a la construcción de los negativos epistémicos.
3.5 El lenguaje no es una cosa.
3.6 El lenguaje es sintomático de las cosas.
3.7 El lenguaje, como auto-referente, es sintomático de su cosa particular.

4.1 Aquello que es inefable no es lenguaje.
4.2 Aquello que es inefable también puede ser parte de la periferia.
4.3 Los atributos directos de los negativos epistémicos son inefables.
4.4 Nada se puede decir directamente sobre aquello que es inefable.

El efecto del texto fue inmediato. La ciudadanía sureña dejó de hablar. Al comienzo se comunicaban entre sí escribiéndose notas, esta ‘solución’ funcionó hasta que un semiólogo reconocido escribió un artículo complementando el texto de Wittgenstein. Según el académico, el lenguaje al que se refería el texto del filosofo-ex-confabulador no se limitaba al enunciado oral, sino que incluía lo escrito y, además, todo aquello sujeto a la ‘lectura’; o sea imágenes, signos, situaciones, contextos, gestos, expresiones etc.
Deseosos de cumplir religiosamente con las consecuencias del Tractatus Silentium, la región negoció la compra de sesenta mil cápsulas japonesas de aislamiento sensorial. Desde octubre de 1961, el 88% de la población austral vive en estas cápsulas. Irónicamente, Serling y Wittgenstein residen en Villarrica, donde operan una heladería.

Encyclopaedia Británica 11th Ed.

ENORMES CACHALOTES VARAN EN PLAYA DE PUNTA ARENAS


Miércoles 22 de Noviembre de 2006 13:53
El Mercurio Online

PUNTA ARENAS.- Dos enormes cachalotes de aproximadamente 15 metros de largo y 40 toneladas de peso vararon en playas cercanas a Punta Arenas, llamando la atención de los habitantes de esa zona. Los animales, ambos machos, fueron avistados por personal de la Armada en el sector de Punta Dúngenes, distante a unos 300 kilómetros al norte de Punta Arenas, cerca de la boca oriental del Estrecho de Magallanes. Expertos del Centro de Estudios del Cuaternario (Cequa) de esa ciudad, se trasladaron a la zona para tomar muestras de dientes y piel de los ejemplares y así investigar las razones del varamiento. Desde ya se descartó la acción de personas en su muerte, que se estableció entre 5 y 6 días atrás. Según explicaron los investigadores, es probable que hayan sido arrastrados por alguna corriente o confundidos por algún ruido, ya que navegan en aguas profundas y guiándose por la audición. Los cetáceos son ejemplares adultos y fueron encontrados con una distancia de 6 kilómetros de distancia entre ellos. Sus restos permanecerán en el mismo lugar hasta su descomposición natural.

FOR YOUR EYES ONLY

De: eolivares@ictionet.org
Para: jonas.libedinsky@ictionet.org
Asunto: Cachalotes
Archivo Adjunto:
http://www.emol.com/noticias/nacional/detalle/detallenoticias.asp?idnoticia=236805

”Supongo que ya leyó la noticia que le adjunto. Fue difícil controlar a la prensa, pero lo logramos. Digamos que los periodistas suelen ser fáciles de convencer cuando uno cita un par de teorías y nombres científicos, claro, eso usted lo sabe mejor que nadie. Pero vamos a lo importante. Ocurrió de nuevo, como en lo de las jorobadas del mes pasado en Nueva Zelanda. Los cachalotes estaban destrozados a dentelladas, a la hembra le arrancaron prácticamente todo el vientre. Pudimos calcular el arco de la mordida, ¡6 metros…! Usted tenía razón, son mayores de lo que creíamos. Conseguimos rescatar algunos dientes enterrados en el macho. Carcharadon Megalodon, ya no hay duda. Y están multiplicándose, creo que pronto será muy difícil seguir diciendo que están extintos, la verdad está saliendo a flote…”

CURUÑADI… MEMORIAS DEL PASADO

Nadie sabe si Curuñadi (Tierras Humedas) existió en un pasado remoto o en un futuro aún más lejano, escondido en el interior hueco del mundo o en un valle secreto amurallado por los Andes Patagónicos. Es una región sombría y triste, donde el cielo aparece eternamente cubierto, separado del exterior por cadenas de gigantescas cumbres que pierden sus picos más altos entre las nubes. El valle está poblado de bosques, ríos y lagunas fangosas, también hay un pequeño mar interior, llamado Kuanyip. Las leyendas relatan que el gran valle es el único y último vestigio de la Tierra Vieja, un continente isla sepultado en un cataclismo que duró un día y una noche. La morfología básica del lugar es una larga y angosta extensión de escarpados valles con una anchura máxima de 90 kilómetros y una extensión de norte a sur de casi 1000 kilómetros.

GENERALIDADES GEOPOLITICAS

  • La Tierra Vieja: Es la Tierra Madre, Wenumapu (Tierra del Cielo) en su nombre original. Para algunos el Edén, para otros el espacio donde Ngen (Dios) y sus Ngenhurnu (Angeles), iniciaron su juego en el mundo. La Tierra Vieja es el lugar donde, según las leyendas más ancestrales, surgieron los Elchenes o Adanes, primeros hombres. La Tierra Vieja era un enorme subcontinente, un poco mayor que Europa, que se adentraba por el Océano Pacífico hasta casi alcanzar Nueva Zelanda por el oeste y la Antártica por el sur. En sus dominios surgió una gran y avanzada civilización, que vivió en paz y progreso por casi 10 mil años. Construyeron grandes ciudades y navegaron por el mundo, donde se mezclaron con los nativos y traspasaron parte de sus celosos avances. Pero el poder corrompe y los Señores de la Tierra Vieja fueron haciéndose ambiciosos y soberbios. Dividieron sus dominios en siete reinos (La Casa Huemul, La Casa Albatros, La Casa del Mar, La Casa de las Sombras o Yekamus, La Casa de los Bosques o Yosi, La Casa de la Magia o Kelku y la Casa Antigua o Pincoy), algunos de los cuales aprendieron la fabricación de máquinas y armas con el poder del sol, como los Yekamus Y la Tierra Vieja fue sumida en guerras que desencadenaron una hecatombe en la que terremotos y explosiones volcánicas descontroladas acabaron hundiendo el continente en un día y una noche. La Tierra Vieja desapareció de la faz de la Tierra y de sus memorias. La Isla de Pascua y los canales del sur de Chile son vestigios del cataclismo. Hubo supervivientes, claro, contados con los dedos. Algunos se mezclaron con el resto de los habitantes del planeta y fueron claves en el surgimiento de la actual civilización. Los otros, los menos, los pura sangre descendientes de los mismos Elchenes se refugiaron en valles y ciudades perdidas que no tardaron de desaparecer bajo el velo del mito y la leyenda. Se dice que solo la tierra de Curuñadi sobrevive, anclada en un tiempo ajeno, dominada por la magia y también el miedo.

PUEBLOS

  • Pueblos Libres del Norte: Así se hacen llamar los pueblos supervivientes de la Tierra Vieja. Habitan todos en el hemisferio norte del Curuñadi, entre la cordillera del Hornocapo y el mar de Kuanyip. Agrupa diversos pueblos repartidos en pequeños reinos, como los Yosi, los pescadores de Mochacan, los jinetes de Huemul y los Pincoy. El concilio de sus soberanos se llama a si mismos Señores de la Tierra Vieja y alguna vez sirvieron unidos bajo el trono de Ngenechen de Wenutitlan. Sus enemigo común son los Yekamus del otro lado del mar, del Hemisferio Sur.
  • Jinetes de Huemul: El principal pueblo guerrero entre los Libres de la Tierra Vieja. Aprendieron el arte de domar al Huemul, animal al que usan como cabalgadura y arma de guerra. Son mensajeros y soldados.
  • Mochadores o Mocheros: Pueblo de Pescadores. Se dedican a la pesca y faenamiento de Mochas (Ballenas) y su comercio y existencia depende de estos gigantescos Cetáceos. Veneran con especial temor a la gran Mocha Blanca. Son vestigios de la desaparecida Casa del Mar.
  • Kalkus: Magos, grupo religioso que sirve a los Señores de la Tierra Vieja. Son expertos maestros de la hechicería blanca. Sabios y consejeros, cada vez quedan menos. Sólo son hombres. Visten capas y capuchas azules, verdes y rojas de acuerdo a su rango.
  • Calchonas: Némesis de los Kalkus. Sólo son mujeres, sirvientes de los Yekamus. Brujas poderosas, amas de la magia negra, la mecánica y el engaño.
  • Yekamus: Los adversarios de los Pueblos Libres de la Tierra Vieja. Antigua Casa de las Sombras. Agrupa a la mayoría de los pueblos del hemisferio norte como los Jinetes de Trepiales y los Traukos.
  • Yosis: Enanos, habitantes de los bosques. Son una de las razas más antiguas de la Tierra Vieja y alguna vez se hicieron llamar Casa de los Bosques. Son los duendes de las leyendas patagónicas y tienen poderes sobrenaturales, vinculados con la naturaleza.
  • Pincoy: Otra Casa de los Pueblos Libres de la Tierra Vieja. Son humanos muy delgados, de líneas casi asiáticas, que han sido adaptados a la vida submarina con membranas en sus extremidades y un sistema respiratorio similar al de los cetáceos. Es una de las especies más antiguas y legendarias pero hoy son sólo un recuerdo, refugiado y resentidos, en la ciudad subacuática de Itlan. Se consideran hermanos de los Mochas, por lo que odian con especial desprecio a los Mochadores.
  • Traukos: Pequeños humanoides de un voraz apetito sexual y caníbal. Fueron creados por las Calchonas como una versión repulsiva de los Pincoyes. Viven en cavernas del hemisferio sur y son fieles a los Yekamus. Son tropas suicidas y fieros combatientes. Solo son machos y acostumbran a raptar mujeres para mantener su especie. De todas las criaturas del Curuñadi son las más repugnantes.

BESTIARIO

  • Serpientes Viejas (Tren Tren/Cai Cai): Dragones, serpientes antiguas. Hay dos especies:
    -Tren Tren: Dragones de tierra. Grandes serpientes grisáceas. No tienen piernas, se mueven como boas pero tienen cabezas de dinosaurio, cuernos y escamas. Miden casi treinta metros de largo y habitan en las profundidades del mundo. Están más allá del bien y el mal. Son de color tierra, excepto su rey, Cavilolen, que es enteramente negro. Expulsan fuego por la boca.
    -Cai Cai: Dragones del aire. Serpientes voladoras. Tienen garras y grandes alas de aguila. En lugar de escamas llevan plumas. Son un poco mayores que sus homólogos terrestres, los Tren Tren, y habitan las cumbres más altas del Calén, una de las cordilleras de Curuñadi. De color amarrillo sucio, su señor, Agchen se distingue por su color rojo. Expulsan vientos helados por la boca.
  • Huemules: En un mundo sin caballos, estos cervidos cumplen esta función. Un poco mayores que los huemules del exterior. Los hay además de varios colores. Blancos, pardos, negros e incluso manchados.
  • Basilisco: Criaturas inmundas. Lagartos gigantescos y rastreros. Algunos han sido amaestrados por los Yekamus y usados como monturas y para tirar carros de guerra. Básicamente son dinosaurios saurópodos, como los brontosaurios, cuadrúpedos de cuello y cola larga.
  • Imbunches: Abominaciones creadas por los Yekamus tratando de imitar al hacedor. Hombres artificiales hechos de metal e impulsados por vapor. Son como robots anacrónicos, con un look similar a un hombre locomotora.
  • Mochas: Ballenas. Grandes cetáceos. Es un genérico para ballenas de barba, orcas y cachalotes. Son los grandes mamíferos marinos que habitan en el mar de Kuanyip.
  • Cuero o Huecu: Pez de la familia de las mantas. Habita en el mar de Kuanyip y en los ríos del Curuñadi como el gran Putracautín. Son muy temidos por los lugareños, pero en realidad se trata de una especie pacífica, que incluso puede ser domesticada. Los magos de la orden de los Kalkus suelen usarlos para remontarse por los ríos y lagunas, además gracias a su magia los hacen volar. Sus jinetes siempre van de pie sobre sus lomos.
  • Trapial: Grandes felinos. No son ni tigres, ni leones ni jaguares. Básicamente se trata de Tigres Dientes de Sables supervivientes. Salvajes y feroces. Son los adversarios naturales de los Huemules, tanto así que los jinetes Yekamus los usan de cabalgadura. Son los mayores carniceros del Curuñadi y sólo temen a los Tren Tren/Cai Cai.
  • Albatros: Grandes aves, señores de los cielos. Blancos como el amanecer. Algunos de ellos, los mayores, que casi superan los seis metros de envergadura, ellos tambiñen aprendieron el idioma de los hombres. El más célebre de los Albatros es Curalafken, quien fuera montado por el propio rey Ngenechen
  • Petreles: El reverso de los Albatros. Aves negras, voraces y veloces. Fueron creadas y están al servicio de las fuerzas de la oscuridad. Los Jinetes de Petreles de los Yekamus, los usan para cometer sus fechorías.
  • Camahueto: El Unicornio. Como los Cai Cai/Tren Tren, los Camahuetos son una especie primordial del mundo ancestral. Su cuerno tiene propiedades mágicas y es lo único que puede matar a un Tren Tren/Cai Cai. Viven en las profundidades del bosque y rara vez aparecen. Aunque representan el bien, mantienen una oportunista neutralidad. Pueden ser dóciles como un cabrito o feroces como una tormenta. Hay dos especies. La terrestre, que básicamente es un ciervo muy blanco, con un cuerno recto y en espiral sobre la frente y los marinos, un narval (ballena con cuerno) también completamente blanco. La lanza Curahueco esta hecha a partir de dos cuernos de Camahueto de mar.
  • Piuchenes: Vampiros. Grandes murciélagos chupadores de sangre.
  • Aiwin: Sombras vivientes. Como los Imbunches son anticreaciones de los Yekamus. Sirvientes y mensajeros, no tienen cuerpo ni forma, son simplemente un trozo de oscuridad con voluntad al servicio de sus siniestros patrones.
  • Colo Colo: Gatos dotados de poderes psíquicos. Roban pensamientos y los proyectan como imágenes en las mentes de sus amos. Son astutos e inteligentes. Quedan muy pocos, la mayoría han sido asesinados por hombres temerosos de los poderes de los felinos.

Neftalí Reyes

Neftalí Reyes es conocido principalmente por su labor docente en la escuela de ingeniería de la Universidad de Chile, y como autor de varios libros de divulgación. El más importante de estos, “Incitación al vorticismo y alabanza de la ciencia chilena”, sigue siendo texto de lectura obligatoria en la enseñanza básica.

Sin embargo, pocos han leído el libro, aún inédito, que terminó con su carrera académica. Con el título provisional de Disgresión General, plantea en apretadas 600 hojas mecanografiadas a un espacio la Teoría de la Disipación modial, o Metamorfosis de circuitos cronóticos en condiciones de realidad aleatoria, trabajo que consumió por lo menos sus últimos veinte años de vida.

Sus aportes científicos le valieron el premio nacional de ciencias de 1945, mismo que le fue retirado tras una confusa conferencia de prensa en la que anunció las bases de su teoría. Mantuvo algunas de sus cátedras, si bien con una merma significativa de alumnos y con un estricto control de las materias impartidas. Fue definitivamente despedido en 1953, tras la publicación artesanal de Residencia cuántica, una extraña cruza de poesía, física teórica y política contingente, en donde atacaba violentamente la enseñanza de la ciencia en las universidades.

Tras el rechazo de sus ideas, eligió convertirse en un paria social, enclaustrándose en una modesta pensión de calle Maruri.

ABRIL 04, 2011

Tres meses después del inicio de las hostilidades con Venezuela…

Los ecos de radar solían despertar a los controladores de la base Los Cóndores de Iquique, la mayoría de las veces falsas alarmas: pájaros, vuelos comerciales y una que otra aparición furtiva de unidades adversarias. Nada muy amenazante o muy inusual. Hasta esa mañana.
La sombra era grande, se movía rápido y su silueta fue fácil de reconocer por los operarios del radar. Un Flanker acababa de entrar al espacio aéreo chileno y eso no tenía nada de gracioso. Treinta minutos después, el capitán Martín Cáceres, alias Aucán, tiró hacia atrás la palanca de control de su nave y la tobera del F-16 Puma, rugió impulsando al caza a casi mil kilómetros por hora, en línea recta hacia el supuesto enemigo. Castro, AKA Manque, su compañero de ala, revisó por última vez los sistemas de su máquina y acelero tras el primer F-16. Cinco años de servicio en la FACH y a minutos de ser probados en combate. Dos F-16 Block-50 Puma, versiones de última generación del Fighting Falcón de Lockheed-Martin, prontos a tener su bautismo de fuego en un cuerpo a cuerpo con el orgullo de la aviación venezolana, el SU-30 Flanker de Sukhoi.

Aucán y Manque conocían las fortalezas de sus adversario, sabían que muchas de ellas superaban las prestaciones de sus naves, pero no era menor que habían aprendido a maniobrar el F-16 como pocos. Y como pocos, tenían la certeza que el Puma, a pesar de su menor tamaño, podía ser muy duro para los puñetazos.

El primer Flanker se dejo caer desde el sol y como un rayo de dos colas pasó entre los dos Pumas. “Aucán” giro hacia la nave venezolana y empezó la persecución. El cazabombardero de fabricación rusa ascendió un poco y aceleró sus motores. El primer F-16 se ubicó entre las estelas del SU-30 mientras su piloto, Aucán, desplegó en el HUD de la cabina toda la información del adversario. Apuntó a los motores del otro avión con uno de los dos AIM-9 Sidewinder que asomaban de los rieles ubicados en el borde exterior de las alas. Si las hostilidades se calentaban, un misil de corto alcance sería suficiente. Más arriba, Manque subió su nave y se emplazó encima del Flanker, iniciando las maniobras de disuasión. Aucán pensó que el piloto venezolano confiaba demasiado en las prestaciones de su nave y en el actual escenario, no era saludable confiar demasiado en las máquinas. Abrió comunicación con el SU-30 y le advirtió que estaba en espacio aéreo chileno y que de no abandonar el área de inmediato se verían obligados a abrir fuego. Aunque sabía perfectamente que estaba marcado, el Flanker ni siquiera intentó virar. Aucán activo el cañón M61 de seis tubos, montado al lado izquierdo del fuselaje y se preparó a dar un disparó de advertencia. Pero la alarma de misil interrumpió cualquier acción. La estela de un aire-aire R-27 cruzó el cielo y se dirigió al F-16 de Manqué. A pesar de lo repentino, éste alcanzó a virar y a activar las contramedidas. Había otro Flanker en el área.

Quizás los cazas venezolanos estaban mejor armados y eran más maniobrables que los F-16, pero la aviónica y electrónica del avión de fabricación norteamericana era al menos una década años superior a la rusa. Aucán liberó el seguro del cañón y abrió fuego contra una de las colas verticales del Flanker. Sin embargo la agilidad de la nave venezolana superó a los disparos. Antes de que una bala tocara su superficie, el Flanker apuntó hacia abajo sus toberas orientables y frenó en seco, haciendo que el F-16 pasara de largo, adelantándose para así ponerlo al alcance de sus armas. Aucán maldijo el estar a merced de su adversario y activó de inmediato las contramedidas electrónicas para matar los dispositivos de puntería del Flanker. Supuso que la idea había resultado, porque a pesar de estar pegado a su cola, el SU-30 no fue capaz de marcarlo.

Más arriba, el segundo SU-30 se dejó caer sobre el F-16 de Manque, liberando una ráfaga de proyectiles de 30mm a través del cañón GSh-30-1. El piloto del caza chileno, aceleró para evitar ser tocado, pero no consiguió evadir dos tiros que golpearon contra uno de los estabilizadores horizontales de la cola. Levantó la nariz del Puma y dio un giro en 360º para situarse justo detrás del avión venezolano. Pero las toberas vectoriales del Flanker nuevamente jugaron en contra del F-16, evitando que el caza chileno tomara la delantera. Aucán vio que su compañero estaba en problemas y aceleró para cortar el ataque del segundo Flanker. Apunto uno de sus Sidewinder y disparó, el misil aire aire trazó una curva precisa hacia uno de los motores del SU-30. La nave venezolana ascendió en línea recta, luego comenzó a girar y disparó una salva de dispensadores chaff, los que desviaron al proyectil guiado por calor. Adivinado la movida del Flanker, Aucan aceleró el F-16 y disparó el cañón de su nave contra una de las toberas del SU-30 haciéndola estallar. Cincuenta proyectiles de 20 mm volaron cada centímetro del escape del jet y convirtieron el chorro de la nave en una negra columna de humo y llamas. El avión se sacudió un poco, pero el piloto consiguió remontar apagando el motor dañado, sosteniendo todas las prestaciones de la máquina en su otra turbina. Subió un poco su techo de vuelo y huyó lo más rápido que pudo del lugar.

Aucán buscó a su compañero de ala, pero Manke ya estaba fuera de su rango visual en un vertiginoso cuerpo a cuerpo con el otro SU-30. Usó el radar AN/APG-68 para ubicar a los aviones y cuando los tuvo localizados, encendió el postquemador para interceptar el duelo. El Flanker vio venir el segundo F-16 y acudió a la maniobra cobra para frenar en seco y dejar pasar a sus dos adversarios, poniéndose él en ventaja de tiro. Pero Aucán se apresuró a la maniobra y ascendió su nave por encima del SU-30. Quizás el F-16 no poseía el rango de agilidad aviónica de su contrincante, pero la electrónica superior le permitió prever la opción de guerra del venezolano. Rodeado por dos F-16 y con su compañero fuera de combate, el Flanker no tuvo más remedio que adelantarse a los cazas chilenos, encender sus postquemadores gemelos y acelerar al máximo para salir rápido de ahí. Mach 2.3, casi 2.500 kilómetros por hora era una ventaja de velocidad bastante superior al Mach 2.0 del F-16. Antes de que Aucán y Manke reaccionaran el Flanker estaba lejos de contacto visual, intentar perseguirlo habría resultado inútil.