Los Arcontes de Toesca


Cosas que se saben de Joaquín Toesca:
Nació en Roma en 1752, y se formó desde muy joven con el arquitecto Francisco Sabatini, seguidor del movimiento neoclásico. Toesca alternó la enseñanza práctica aprendida junto a su maestro con los estudios que realizó en distintas escuelas, como la Real Academia de Barcelona, la Academia de San Lucas de Roma y la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando en Madrid, en donde permaneció entre 1776 y 1779 mientras ayudaba a Sabatini en las obras comisionadas por el rey de España. En 1779, a petición del gobernador Agustín de Jáuregui y el arzobispo de Santiago Manuel de Alday y Aspée, Toesca viajó a Chile para proyectar y dirigir la construcción de varias obras pública, entre ellas las dos prioritarias eran la construcción de la catedral de Santiago y el diseño de un edificio que albergara la Casa de Moneda. Toesca trabajó pacientemente en ambas obras hasta su muerte en 1799, sin verlas concluidas. El edificio de la Casa de Moneda, una de las construcciones más importantes de la época, fue terminado por uno de sus discípulos y entregado en 1802.

Cosas que no se saben de Joaquín Toesca:
Cosas que no se saben de Joaquín Toesca:En 1770 un gran incendio destruyó la Sede Francmasona de Roma. Escarbando entre los escombros, Toesca encontró algunos documentos perdidos mucho tiempo atrás, mientras rescataba importantes cartas yotros objetos de valor de las llamas. Aquellos misteriosos papeles se encontraban redactados en una clave desconocida para Toesca, su maestro Sabatini o cualquier francmasón de la época. A fuerza de uncontinuo y meticuloso esfuerzo y perseverancia, Toesca, finalmente,resolvió el código, descifrando los documentos y encontrándose en posesión de los secretos del Colegio invisible: secretos que la francmasonería ortodoxa había perdido mucho antes. Los documentos facilitaban también el enlace con una orden continental que parecía poseer secretos incluso más profundos y daba la dirección de una alta iniciada llamada Belle Saint-Croix, en Ingolstadt, Baviera. Toesca, sin embargo, era un inflitrado en la francmasonería y su verdadera lealtad estaba con la sociedad secreta más secreta de todas,el Aenigma Regis. Guiado por Belle Saint-Croix, Toesca fundó la Orden de la Amphisbaena y empleando las técnicas que les enseñase Saint-Croix y los documentos cifrados, recreó gradualmente todo el repertorio de trabajo de ocultismo cabalístico que subyacía a la Orden Rosa Cruz de la Francmasonería y se dedicó seriamente a establecer contacto astral con las Altas Inteligencias de otros planos para que le educasen y guiaran.Siguiendo los dictámenes de estos ‘Arcontes’, Joaquín Toesca viajó a Chile donde, además de construir el Cabido de Santiago, el hospital San Juan de Dios, los tajamares y la catedral de Santiago; llevaría acabo su obra más ambiciosa, un artefacto del tamaño de un edificio capaz de absorber la fuerza vital de quienes lo ocupaban y sobretodo,las potentes energías del conflicto, el odio y la ambición. Este edificio era no otro sino La Moneda.Tal y como se sabe, el edificio fue terminado por LorenzoD’Archangeli, discípulo de Toesca que como su maestro, era miembro de la Amphisbaena. D’Archangeli llevó a cabo todas las instrucciones de su mentor, todas menos una: el sacrificio humano que serviría de llave para abrir las puertas de este mundo a los Arcontes. El sacrificio debía ser voluntario y el propio Toesca pretendía autoinmolarse en el centro del edificio donde convergían las fuerzas místicas del mágico territorio de Chili-Mapu, pero la muerte le encontró antes a él y la misión quedó en manos del joven Lorenzo que, acobardado, regresó a Roma. Ciento setenta y un años más tarde y mientras La Moneda absorbía todos los orgones desatados por el golpe militar, un valiente héroe se sacrificaba en el punto exacto donde las puertas de la percepción finalmente serían abiertas, dando paso a los terribles Arcontes que esclavizarían a la humanidad hasta la Segunda Venida.

Yiye para presidente

Con una multitudinaria presencia se dio inicio a las festividades del Te Deum, en la explanada del Templo Evangélico de Maipú, antiguo templo votivo católico. La muchedumbre, calculada en unas veinte mil personas, escuchó entre gritos y alabanzas las palabras del Obispo Bisama, quien impartió bendiciones para todos. El aniversario del primer año del credo evangélico como religión oficial de Chile, tras la proscripción del catolicismo, se vio empañada por la ausencia de personeros de gobierno, incluido el presidente, Patricio Aylwin, quién señaló no poder asistir debido a su avanzada edad.

La ceremonia se cerró con la esperada presencia de Yiye Avila, profeta y sanador que nos bendice con su visita. Después de realizar la milagrosa cura de lisiados y no videntes, Avila fulminó a seis miembros de nuestra iglesia que habían abjurado públicamente de La Fe. La visión de sus cuerpos estallando en llamas fue sobrecogedora, pero la multitud entendió que el Profeta lo hacía por mandato divino, y miles de agradecidos fieles se postraron embargados por las lágrimas.

Esperamos que este Te Deum convenza a nuestras autoridades de colocar definitivamente a Yiye Avila en la presidencia de Chile, para terminar con la creciente polarización y el odio que parece crecer en los corazones de la ciudadanía.

Artículo editorial, revista Atalaya evangélica

Lo que hay que ver

Chile, su historia y sus habitantes existen únicamente en un pensamiento fugaz y arbitrario de esta mujer. Esta fotografía retrata el instante preciso de nuestra génesis en su psique. Según la programación de la revista del cable Vive!, ella dejará de pensar en nosotros cuando el líquido toque sus labios, evento que ocurrirá el miércoles 29 de noviembre a las 21:30 por Sony, después de un episodio de 30 Rock.

Pederastia


…El Papa Paulo VI, lanza su encíclica «ECCE HOMO», en medio del escándalo que significó su declaración de la semana pasada, donde se refería a si mismo como «Pederasta, por la gracia de Dios».
«Si el papa es un pederasta, quiere decir que Dios no considera eso como un pecado…», declaraba un fiel a la salida de la Plaza de San Pedro, en Roma.
El Vaticano anuncia en la encíclica que, dada la infalibilidad del papa, la pederastia pasaba a formar parte de las conductas santas de un elegido por Dios, causando gran controversia y profundos conflictos políticos en diversos países, donde la Iglesia Católica es una entidad de enorme fuerza política transversal de la sociedad.

imagen: Hermoso vitreaux, con piezas de cristal traídos desde Alemania, que adorna los interiores de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Conmemora el 5º aniversario de la promulgación de la pederastia como «gracia divina, permitida por Dios mismo a sus servidores más directos».

Monstruo


…Confirmado, los restos del monstruo que emergió ayer del mapocho, ocasionando pánico generalizado entre los transeúntes, corresponde a los 400 kilos de chupetes de goma, unidos con saliva en descomposición y otras materias orgánicas desconocidas, que escaparon desde los subterráneos de Chilevisión (ex, Canal 9) gritando profecías, juramentos de venganza y anatemas en latín contra los ex-niños, hoy dueños de empresas, ministros y gerentes, que causaron su existencia. La bestia avanzó hacia el centro de Santiago destruyendo todo a su paso recitando los nombres de cada uno de los niños que habían colaborado en su creación.
La municipalidad informó que la limpieza de la ciudad tomará varios días, la goma y la materia pegajosa que impregnó el centro después de la explosión, no resultaron fáciles de extraer.

Ucronía minimalista: una lágrima de la virgen

Y en ese instante se muerden porque chocan, se arrancan los párpados porque han abierto los ojos. Llegados desde el desierto adornado de ruinas y petróleo seco, desde la pulcra ciudad de torres blancas, desde el fondo de la alcantarilla hedionda en medio de la sierra entre las montañas yermas. El hombre infeliz y vacío, la mujer hecha de olor a sí misma, el muchacho salvaje de sonrisas como cuchillos. Y las estrellas suben al cielo porque algo nuevo está naciendo. Por fin, gimen las multitudes del coro griego, por fin, murmuran los atareados hombres y mujeres plomizos que atraviesan sin parar la Plaza de Armas. Algo está cambiando.



El celular suena, allí en la cima de la montaña. La mujer cuyo cuerpo es puro deseo lo saca de entre sus pechos y presiona el botón. Jadea. Escucha.



-Es todo mentira –crepita una voz que parece de computador-, lo que encontraron no es lo que están buscando…



El jadeo de la mujer y el chillido del muchacho ensangrentado en un mar de vidrios rotos son uno, las voces de las monjas muertas corren a través de los cables de la red mientras los ángeles intentan despertar de su inquieto sueño en los rincones más impensados: el sótano de un café con piernas, detrás de un sillón en un palacio de gobierno, la copa de un árbol en un zoológico metropolitano. El hombre infeliz y vacío tiembla, la ciudad parpadea como una ilusión, el desierto sembrado de tarjetas de crédito aparece y desaparece como un truco de mago. Nadie quiere gritar pero tienen que comenzar a hacerlo. “Están aquí, están aquí”.



Comienza el terremoto.



Y a través del territorio las hordas pelean, los cuerpos de las personas son los campos de batalla. La mujer hecha de líbido y de ojos color semen y miel baila en medio de la disco pisoteando su celular, acariciada por las manos de mil adolescentes y castigada por las miradas-látigos de cientos de viejos verdes, el chiquillo de los brazos metálicos y las danzas de colores corre por los pasadizos y los túneles seguido por otros niños aún más jóvenes. Gritan cosas diferentes. Cosas muy diferentes.



Cosas como: todo va a estar bien. Siempre he querido esto. Si sigo teniendo fuerza de voluntad lo lograré. Nunca te voy a olvidar. Me gustaría que me miraras. Estoy tan herida, tengo tantas ganas de morirme. Quiero encerrarme, depilarme y huir de mis ojos. Inquieto, feliz, inalterable. Te vamos a cortar en pedazos. Ya estoy lejos, todo ha terminado. Baila niña roja, la mandíbula rota. Cuidado, cuidado, cuidado…



Y cuando el peligro se hace evidente, las catedrales dejan caer trozos de cemento y gárgolas (y el chiquillo sigue corriendo y la diva sigue bailando), el hombre infeliz escapado de la cárcel ve como las madres y padres del país corren a través del estrépito de las calles para salvar a sus hijos del desastre. Pero las cunas están vacías, las parvularias están clavadas a la pared por los ojos, sangrantes y sagradas, los niños no están en ninguna parte. Lloro y crujir de dientes.



El metro no corre. Las estaciones están vacías, o llenas de muertos, o llenas de fantasmas que susurran tantos secretos que se confunden con el ruido de todas las radios tocando a la vez.



Y en ese instante ya no pueden bailar ni correr ni rechinar más los dientes. La mujer encuentra al hombre y encuentran al chiquillo, con sus ejércitos esperando en distintos rincones de la ciudad eterna. “Una tierra de hombres libres” dice el hombre, los ojos desaforados. “Toda la sed del universo entre mis piernas” susurra la mujer chorreando saliva. El muchacho dice llorando: “Vamos a escapar, destruiremos todo para poder escapar.”



Es casi el fin. Se miran largamente en la cima de un edificio. Alrededor de ellos, los oficinistas y los ladrones y los ancianos llorando en las plazas. Las calles crujiendo con el terremoto. Se preguntan con los ojos, con las armas en las manos: ¿hay algo más que decir?



Sí, hay algo más.



Los tres han escuchado la voz. No es una voz, es un gemido. No es un gemido, es un maullido. No se escucha, está en sordina, pero se siente por toda la ciudad, y por primera vez todos los habitantes levantan la cabeza al cielo para escuchar.



Es la voz de una niña pequeña.



¿Grita? Sí, grita, chilla palabras llenas de ternura como osito, peluche, mantita, azúcar, cariño, beso, dulzura. Y el chillido revienta los vidrios de toda la ciudad.



Y es entonces que los viejos locos, las prostitutas, los gerentes, los empaquetadores del supermercado y los camarógrafos de la ciudad pierden la cabeza, comienzan a echar agua por los ojos y sangre por las orejas, y a repetir la profecía: “doce niños con el torso desnudo trayendo la ola del desamparo, borrando toda palabra y todo futuro, bendiciendo el presente y el agua purificadora hasta la limpieza final bajo las olas y junto a la cordillera, amén.”



Lloro y crujir de dientes, gritos mientras las olas comienzan a llegar desde el poniente y arrasan la ciudad en tan solo trescientos sesenta segundos, desde el mar y desde el cielo, desde los brazos de la costa y desde las nubes que llueven, hundiéndolo todo y llegando hasta la misma montaña. La ola final, la ola criada en los sueños de miles de desesperados, noche tras noche, fiesta tras fiesta, llanto tras llanto, después de los abortos y las partidas y los disparos. «Esto es lo que soñé siempre» dice alguien con una voz muy tenue, dicen muchos mientras son cubiertos por la tormenta. Si la virgen es la madre del gigantesco Dios, piensan al mismo tiempo la mujer, el hombre y el muchacho, una sola de sus lágrimas es un mar capaz de destruir el territorio. Y ese mar lo está destruyendo todo en pocos segundos, chispas y volutas de vapor en su superficie. Adiós Chile, adiós gentes, adiós. Y entre la sangre, la suciedad que se refleja en los nubarrones, los gritos ahogados por la tromba del agua, sólo un pequeño punto que brilla, contemplado por los satélites del Imperio y por los televisores del tercer mundo.



¿Qué es? ¿Cuál es su nombre?



¿Qué ven los ahogados desde el fondo de la ciudad inundada?



Una virgen blanca, rota, que flota en el mar junto a la cordillera, que llora sangre antes de hundirse para siempre.



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Edificio Diego Portales

Este es el edificio que durante 75 años tuvo el nombre de Edificio Diego Portales. Sede en un tiempo del ministerio del interior, se convertiría en un ente tentacular que albergaría a todos los ministerios y carteras del país, incluyendo a la presidencia de la república. Dada su capacidad de funcionamiento autónomo, en 1948 se presentó el Proyecto Portales. La idea, básicamente, era convertir al edificio en una ciudadela separada del resto de Santiago, en la cual todos sus funcionarios debían vivir hasta su muerte. Cuando en 1952 el proyecto se puso en marcha, los siete mil funcionarios del edificio desfilaron en silencio por la alameda, que pisarían por última vez. Cuando hubo entrado el último, las pesadas puertas de hormigón pretensado se cerraron para siempre.

La vida en el país continuó con normalidad. Los servicios públicos y administrativos funcionaban, y las colas frente a los centenares de cajas en la muralla norte del Diego Portales avanzaban rápidamente. La ciudadanía aceptaba optimista la seguridad que daba el saber que los funcionarios públicos vivían para su trabajo dentro del edificio, y las noticias de sus decesos, y posteriores reemplazos, fueron cada vez menos novedosas, hasta ser prácticamente ignoradas.

En 1958 las fuerzas armadas presentaron formalmente su propio proyecto de edificio, el proyecto Concepción, que fue rechazado por el senado en una transmisión televisiva desde el interior del Diego Portales.

Fue tras el terremoto de 1960, que abrió la hasta entonces desconocida fisura del valle del Aconcagua, que el edificio empezó a funcionar mal. Se supuso que su gigantesca mole había sido afectada por el sismo grado 8,6 en la escala de Richter. Las comunicaciones desde el edificio fueron espaciándose, hasta cesar del todo unos tres meses después del terremoto. A la paralización de todos los servicios administrativos y legales, se le sumó el caos de una ciudad casi en ruinas.

Se intentó contactar con los habitantes del edificio por todos los medios, pero sin resultados. Se probó con explosivos, maquinaria pesada y hasta con espiritistas. Se intentó un acceso subterráneo, pero los cimientos acorazados se hundían kilómetros bajo tierra: El Diego Portales era una fortaleza impenetrable, construida para garantizar la existencia del país ante cualquier amenaza. El hecho de que las puertas estuvieran decoradas con relieves de símbolos sagrados mapuches, hizo suponer que el edificio estaba protegido por algún tipo de magia.

Hoy, trigésimo aniversario del terremoto, el edificio continúa intacto, si se lo mira desde fuera. Nunca se ha podido acceder a su interior, y las hipótesis sobre lo que realmente pudo pasar dentro, son centenares.

Extra!, Extra!


Santiago de Chile, 24 de noviembre de 2006, 19:38 (Reuteres).

Marco Antonio Pinochet declaró que Augusto Pinochet Ugarte, su padre, habría muerto!!!
El abogado de 44 años, citó a los medios a una conferencia de prensa en la Fundación Augusto Pinochet para dar detalles sobre el rumor que, a horas de esta mañana, había invadido las redacciones de los medios informativo.
Para sorpresa de todos, Marco Antonio Pinochet confirmó la muerte del ex-dictador en los siguientes términos:
«Hoy, a las 6:35 de la mañana, falleció en su cama tras una larga noche de sufrimiento, la persona que decía llamarse Augusto Pinochet Ugarte. Antes de morir, confirmó una sospecha que la familia tenía desde hacía años atrás. Se hizo presente el albacea de su testamento y nos comentó la información que ustedes también han recibido». Acto seguido se puso de pie y salió sin dar más declaraciones.
Las reacciones fueron inmediatas. La Agrupación de familiares de detenidos desaparecidos alega que es una treta para eludir responsabilidades, las agrupaciones pro-gobierno militar desconocen la veracidad de las afirmaciones y se declaran en alerta para defender la herencia del General Pinochet. Los partidos políticos no emitieron declaraciones y el gobierno confirmó que no habrán funerales de estado para el ex dictador, hasta esta mañana procesado por diversos cargos.
La Democracia Cristiana, principal partido aludido en la declaración, no hizo comentarios pero adelantó querella por injurias. Su presidenta, Soledad Alvear, acusó intento de asesinato político y anunció una conferencia de prensa para mañana a las 10:00 AM.
En términos resumidos, la declaración asegura que Augusto Pinochet Ugarte habría muerto en el atentado a su persona, ejecutado por el Frente Patriótico Manuel Rodríguez en 1986, y que habría sido suplantado en el cargo por uno de sus doppelganger cultivados en Colonia Dignidad por biólogos alemanes refugiados. La Democracia Cristiana, que perseguía alcanzar el poder por la vía democrática una vez caído el gobierno militar, al enterarse de su muerte vió en peligro sus pretensiones al vislumbrar la posibilidad cierta de una guerra civil, luego de la muerte de Pinochet y una toma del poder del socialismo duro por la vía armada. El presidente del partido se habría reunido con los militares y les habría entregado información acerca de Carrizal Bajo, a cambio del compromiso de una salida democrática en el corto plazo y la condición de entregarle el mando a un candidato de la Democracia Cristiana. A su vez, tomaron el compromiso de jamás revelar la naturaleza ficticia del golem que asumiría el mando. Solo el perro de Pinochet, sacrificado en su momento, se dió cuenta de la irregularidad. Algunas pequeñas incoherencias despertaron sospechas de sus familiares más directos, pero el secreto se mantuvo sin mayores contratiempos.
El incidente de Londres fue decidor. El doppelganger intentó decir su verdad, pero los magos ingleses que vigilaron durante años a su gobierno, lo inmovilizaron y lo reprogramaron antes de devolverlo a Chile.
Suponen que los verdaderos restos de Pinochet se encuentran dentro de la pared de concreto de la represa de Alto Bío Bío, un punto mágico del territorio y frontera del país nuevo que comienza a construirse secretamente en el sur de Chile.

Una Carta


LA CARTA DE ERNESTO RODRIGUEZ QUEZADA

Dos años atrás en la casa en que había vivido el Empresario Ernesto Rodriguez Quezada y su familia; su mujer Noelia Oyarzo Carrasco y sus dos hijos de 4 y 12 años, se encontró la carta que dejó antes de cometer el parricidio contra su familia e inmolarse con 50 kilos de explosivos en las nuevas oficinas , recién inauguradas del Servicio de Impuestos Internos en la comuna de Las Condes en Santiago, destruyendolas completamente y causando la muerte de 101 personas. Ahora se da a conocer su contenido a la opinión pública.

A Quien lea esto.

Nací en Chimbarongo hace cuarenta y cinco años. Tenía sueños propios y los de mis padres, de mi familia, que siempre trabajaron bajo el capricho de alguien. Estudié en Santiago y a la edad de veinte años me titulé de Administrador de Empresas.
Trabaje algunos años en varios rubros del comercio como calzado, vestuario y en la construcción. Hasta que decidí hacer mi propia empresa.
Ya no doy mas, todo es dinero y el estado quiere mi dinero, mi casa mi hijos, mi esposa, mi cuerpo. NO. No se los daré jamás, es más, este estado deberá aprender que no sólo se recibe, que hay que saber dar a su gente, y no hablo de los pobres, si no de todos los que nacen en esta tierra, todos los que respiran este aire, todos los que luchamos por este país; y no de ese pseudo estado de aprovechadores que lo tienen y se lo llevan todo como cerdo en engorda, es momento que el cerdo sea sacrificado.


Como se sabe el atentado marcó un gran cuestionamiento sobre los métodos tanto legales como sociales en relación a la carga tributaria del pueblo Chileno, luego, en 1999 se cambió la ley de IVA y el código tributario, colocando como prioridad los intereses del «Estado Humano» por sobre el Estado Político.

EXTRACTO «De las Cartas de los Hombres a las Cartas de las Leyes» de José Manuel Ilabaca, editorial Lexis, Santiago Chile, 2055.

La Conquista mágica de América

Perdido en un sucio y oscuro zaguán entre los laberintos de la ciudad de Sevilla, hundido entre papeles y pergaminos reblandecidos por el asfixiante calor del verano, un cabalista llora abrazado a su pequeño escritorio de caoba. Interminables cálculos tan intrincados como la propia ciudad han desembocado finalmente en una solución que brilla ante sus ojos con la luz de todo un coro de ángeles: la fecha propicia para invadir América esplende ante sus ojos limpia y perfecta bajo complejas series numéricas borroneadas una y otra vez. Es el año 1227, hay un largo camino que recorrer y mucho que preparar.

La existencia de este nuevo mundo había sido descubierta sólo un par de siglos antes. La red de mediums que vigilaban el mundo conocido habían intuído presencias de un nuevo tipo de consciencia colonizando áreas importantes del plano astral y dieron la alarma. Descubrieron que mecánicas desconocidas y poderosas levantaban estructuras ciclópeas entre los pliegues de la mente del planeta, como si otro continente emergiera con inusitado ímpetu.
De inmediato un selecto equipo de videntes fué asesinado y enterrado en una línea recta apuntando hacia las nuevas señales. Todos eran signo géminis, todos cargaban una roca de cobre en el estómago. Los mediums comenzaron a recibir las transmisiones de los videntes asesinados, haciendo puente casi de inmediato. Las señales eran difusas y afloraban como débiles imágenes en blanco y negro, adhiriéndose llenas de estática a las retinas de los mediums como recuerdos de infancia: un olor desconocido, el multicolor manto de una madre, la certeza en la existencia del Tamoanchán. Colores y animales extraños, edificios de piedra, escalinatas ensangrentadas brillando a través de nieblas de incienso, plumas y piel oscura; otro zodíaco cosido a la piel de la noche, cuchillos de obsidiana y brujos poderosos.

Manipularon, influenciaron y tiraron de todas las redes y cuerdas invisibles que sostenían los imperios en su afán de alcanzar las nuevas tierras. Pero lo hicieron delicadamente, pacientemente. Invisibles.

En una de las tres naves viajaba un representante de las logias oscuras. América se estremeció cuando su planta tocó las arenas del Caribe. Todos los chamanes del continente giraron los rostros hacia ese punto con el corazón encogido por una repentina angustia, como si una piedra negra hubiera caído sobre el lago tranquilo de la América astral.

Después, vino la expedición definitiva.

No era oro lo que buscaban los que venían escondidos tras la marea de sífilis que avanzaba, como una tormenta de dientes hambrientos, a través del Atlántico.
Detrás de los ejércitos y su ferretería, aún detrás de la cruz y la hoguera, venía la verdadera peste . Magos, cabalistas, guardianes del grial, alquimistas y sus golems se arrastraban escondidos entre los arcabuces, regurgitando conjuros y venenos que clavaban como alfileres sobre la piel de la Pachamama.
Ellos no buscaban el oro que rodaba por los ríos, “el oro es paga de espadas e ignorantes”. Su oro no era oro vulgar.

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imagen ®Cristián Melo (auca montado en huemul)