Science breakthrough of the year

Nuestro amigo guayec tomó esta interesante nota del último número de la revista Science
y la comentó en el foro. Copio su información en el blogcito.
Adelante, Sr. Guayec:

El ejemplar de la revista SCIENCE del 22 de diciembre de 2006 trae un artículo muy interesante (y más importante aún, de descarga gratuita) sobre los avances/descubrimientos científicos más relevantes/espectaculares del año (más el fraude de las células troncales embrionarias de Hwang).

Nº1 Resolución de la Conjetura Poincaré (para los que hayan visto Pi)
Nº2 Extrayendo DNA fósil (para los que hayan leído El Paralaje Neanderthal)
Nº3 Reducción de la masa de hielo en los polos (para los que hayan visto An Inconvenient Truth o sean parientes de Bush)
Nº4 El eslabón perdido entre el mar y la tierra (para los creacionistas, jeje)
Nº5 Traje invisible (onda Depredador o Ghost in the Shell…)
Nº6 Droga para recuperar la visión (no se me ocurre una película)
Nº7 Biodiversidad (más darwinismo puro)
Nº8 Más allá del límite de difracción (súpermicroscopios)
Nº9 La Persistencia de la Memoria (para los que disfrutaron de Memento)
Nº10 Otro RNA pequeño (para los que todavía creen que en biología molecular está todo dicho… y hay varios)

Sub Aether – 001

Por unos segundos el cielo se abre y una titánica columna de luz cae sobre los cerros en penumbras. Durante un momento Laskov alberga la esperanza de que la nube de polvo se esté disipando, pero antes de que la columna desaparezca sabe que solo se trata de un fenómeno aislado. El arcoíris de la nueva era, piensa. Luego apunta “el arcoiris de la nueva era” en su libreta de notas. Le gustaría haber estado debajo de la columna cuando apareció, quizá hubiera visto el sol, hace meses que no lo ve. No cree volver a hacerlo.
Cuando sus ojos se reacostumbraron a las sombras, siguió caminando por la orilla del mar, rumbo a la ciudad desierta. Aunque desierta es una exageración, alguien debía quedar. Alguien tenía que quedar.
Un observador mirando a Laskov caminar por la playa se hubiera llevado un buen susto. Vestía un abrigo alemán enorme, ceñido a su delagada cintura, que dividía su figura en dos, y una máscara de gas, también alemana. Más parecía un insecto, una gigantesca avispa humanoide, que una persona. En la espalda del abrigo, como penitencia por llevar ropas Nazi, había bordado una gran Estrella de David, ahora completamente tapada por la mochila donde traía comida, agua y municiones para su PPSh, el último objeto ruso de su indumentaria.
Hacía unos meses un tipo, fusil en mano, le había preguntado si era un marciano, si tenía la culpa de que el sol se hubiera apagado, si planeaba invadir la Tierra y otra serie de sandeces. Lenta, cuidadosamente, Laskov se había quitado la máscara, se había atragantado con el polvo de la atmósfera, y había dejado que el tipo sacara sus propias conclusiones. Viendo que Laskov también llevaba un fusil, y suponiendo, probablemente, que lo sabría manejar mejor que él, el tipo se había marchado antes de que Laskov pudiera preguntarle en que lugar de Sudamérica se encontraba. Juzgando por la distancia que había recorrido desde entonces, ahora que tenía Viña del Mar en el horizonte, decidió que se trataba de Ecuador. Un ecuatoriano había sido la última persona viva que había visto. Se preguntó si lo seguiría estando. Se volvió a preguntar si había alguien vivo en Viña.
Debía estar en Reñaca, solo unas cuantas horas más hasta su casa. Revisó sus provisiones. Todavía le quedaban algunas latas. ¿Donde las habría recogido? ¿Antofagasta, Serena? No podía saberlo. Desde México que venía caminando por la costa, para no perder el camino y porque le parecía la ruta más segura. Cuando se le acababan las provisiones hacía pequeñas razias a los pueblos o ciudades costeras, pero trataba siempre de volver lo antes posible. Nunca reconoció una ciudad, ni siquiera las ciudades chilenas, hasta ahora. Le bajó un extraño remordimiento. Quizo haber recorrido más el país cuando estaba vivo. Haber visto menos mundo y más patria. No supo por qué. No había sido Nacionalista, en ese sentido, antes de la Guerra. Quizá Europa lo había cambiado más de lo que creía. Delante de él las rocas formaban una muralla intransitable. Tuvo que internarse hasta la carretera para poder seguir.
Llevaba la mitad del camino cuando la vió, por el rabillo del ojo. Sin pensarlo tomó su fusil y le descargó la mitad de las balas. El traqueteo del arma lo hizo temblar. Jadeó debajo de la mascara. Sudó frio. Recordó una habitación en Dresden, un cuarto oscuro. Una caja de vidrio, llena de. Llena de. Veía más que nada patas. Llena de patas. Patas que se movían, un ser inmenso hecho solo de patas. El rostro pegado al vidrio corredizo. El vidrio corriéndose. Risas. La punta de su larga nariz, y una alimaña pequeña que subía por el puente. Temblando, la brisa soplaba fuerte desde el mar(parecía soplar, estos días, esta época, esta era, siempre desde el mar). Logró volver en si. Arañas. No quería ver más arañas. En su vida. Casi lloró, pero el sentimiento era más estomacal que eso. Visceral. Se quizo dejar caer de rodillas, pero el pasto a sus pies lo aterró. Volvió, lo más cerca del mar que pudo. Comenzó a caminar rápido y luego, como si nada, comenzó a correr. Desesperado. A correr hasta que encontró la playa de nuevo. Se tiró en la arena, exhausto. Luego cuando la penumbra se hizo sombras, supo que el Sol, detrás de la nube de polvo, se había escondido. No veia nada, pero la oscuridad nunca lo había asustado particularmente. Sentía la arena bajo su cuerpo, sabía que nada que lo aterrara iba a salir de la arena.
No había estrellas, ni luna. Recordó la noche Viñamarina de antes, cuando las luces de Valparaíso se veian en la lejanía, hasta Playa Ancha, y los barcos también flotaban iluminados sobre el mar. Ahora le parecía ver un par de luces, pero bien podrían ser alucinaciones. No tenía como saber si se trataba de pequeñas luces cercanas, o grandes luces lejanas. Fogatas, quizá. Sobrevivientes en los cerros de Valparaíso. Ojalá. Antes de dormirse le limpió el filtro a su máscara. El polvo de todo un día cayó a su alrededor, invisible. Mañana apenas se despertara entraría en Viña.

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Decepticons apoyaron pronunciamiento militar

(La Tercera). 12-11-73.

En una conferencia de prensa realizada en el día de ayer en el Ministerio de Defensa Nacional, los miembros de la Junta Militar de Gobierno hicieron público el apoyo prestado por Los Decepticons a las Fuerzas Armadas durante el pronuniciamiento militar.

Acompañados de Starscream, segundo oficial en la línea de mando de Los Decepticons, la Junta recalcó la importancia de la ayuda prestada, señalando que ello reafirma la acción oportuna y salvadora de la Junta Militar en este lado de la galaxia.

Al respecto, Starscream retransmitió un mensaje oficial desde el Alto Mando Decepticon en Cybertron, firmado nada menos que por Megatron, el líder de los Decepticons: “Hago presente a la Junta Militar de Gobierno, y a las Fuerzas Armadas de Chile, mis más sineceras felicitaciones por el éxito de la misión cumplida en el día de ayer”.

Consultado sobre el alcance de este apoyo, Starscream mencionó que hace una semana el líder de los Decepticons ordenó el desplazamiento de unidades aéreas a Chile, las cuales apoyaron las acciones de los Hawker Hunter en su bombardeo a la Moneda y las estaciones de radio allendistas.

Fuentes extra-oficiales han informado que Starscream ha estado en permanente contacto con altos oficiales de las FF.AA. desde hace varios meses, siguiendo órdenes directas del Alto Mando Decepticon.

Strascream señaló: “Apoyamos la acción de la Junta Militar pues ella se enmarca en la lucha mundial contra el comunismo soviético. Asimismo, el Presidente Allende y sus partidos estaban llevando a Chile a un eventual guerra civil.” Asimismo agregó: “Allende y sus partidos legitimaron la vía armada. Cuando eso sucede, cuando los sectores políticos legitiman la violencia, sólo tienes dos escenarios: guerra civil o pronunciamiento militar”, dijo aludiendo al derrocamiento de los Autobots en Cybetron.

Respecto a los informes de diarios extranjeros sobre combates entre Decepcticons y Autobots cerca de Antofagasta, Strascream señaló que se trató de una batalla contra fuerzas Autobots que intentaban crear una zona libre cerca de Chuquicamata. “Los miembros de la Junta me manifestaron el temor a que se creara una zona liberada en ese lugar, donde se recibieran armas provenientes desde Cuba. Detectamos unidades Autobots izquierdistas en la zona, y actuamos con el apoyo de unidades militares chilenas. Puedo afirmar al respecto que no hay autobots operando en Chile”.

Consultado sobre las futuras relaciones entre los Decepticons y Chile, Strascream señaló que se preveé el pronto arribo de los Constructicons para ayudar en tareas de reconstrucción nacional y que antes de fin de año está previsto realizar ejercicios militares entre las FF.AA. chilenas y los Combaticons, quienes en estos momentos se encuentran operando en el Sudeste Asiático.

Extra-oficialmente se ha señalado que una parte importante de la futura relación entre Decepcticons y el Gobierno de Chile, será la construcción de fábricas de energón en las zonas petrolíferas magallánicas.

Sant ag


AP (Reuteres). Las autoridades salieron de su mutismo y hoy a las diez de la mañana admitieron, en conferencia de prensa abierta, lo que todos ya sabíamos días atrás: Santiago está desapareciendo.
La primera denuncia conocida habría surgido en el paradero 45 de Gran Avenida, cuando la ahora famosa señora Alejandra Sánchez estampó una denuncia en Carabineros acusando el robo de toda su calle.
En un comienzo se trató de pequeños detalles, un peine de plástico, una edición inglesa de «War of the Worlds». Pronto el formato se amplió y asistimos al desvanecimiento de monumentos, de algún oscuro barrio deshabitado o los restos de ese edificio abandonado que nadie echaría en falta. Al cabo de los días el fenómeno cobró agallas y desaparecieron establos completos del Club Hípico con caballos y mascotas incluidas.
La autoridad a su vez negó que el gran accidente múltiple frente a La Moneda haya tenido alguna relación con los fenómenos recientes, pero testigos declaran haber visto desaparecer todos los semáforos en cuadras a la redonda.
A pesar de los intentos del gobierno de negar hechos tan evidentes como la repentina desaparición del río Mapocho, reemplazado por un camino de tierra, la situación llegó a límite cuando, una mañana, los santiaguinos fuimos testigos de la completa desaparición de la cordillera de los Andes.
Hoy, después del mediodía, ha comenzado lo más temido por todos. Las denuncias por la desaparición de personas, la desaparición de recuerdos, el olvido, el deja vu frente a cada hito del paisaje; el asalto a los albumes familiares para constatar la existencia de tal o cual familiar, que creemos recordar mientras nuestra memoria se diluye como la topografía de la urbe. Pronto vendrá el pánico general, la estampida desesperada frente a la inminente disolución del territorio, el horror de desaparecer de la memoria de la Historia en una vorágine de gritos de horror, hasta que el agua se calme y la superficie del recuerdo se vuelva un espejo transparente otra vez.
Me pregunto, ¿cuántas ciudades habrá desaparecido ya de la misma manera?

Santiago, 21 de diciembre de 2006

Iluminan un pueblo italiano con un espejo gigante

Via: La Tercera Online, y un montón de otros sites

Solo podía pasar una cosa así en la «bella» Italia!!

¿No les parece lindo que te iluminen la plaza del pueblo con un espejito, niños cantando, plantas floreciendo?. Ahora, no es por pensar mal, pero primero un espejo, luego una lupa….se viene el efecto hormiguita.

El Plan de Google para la dominación mundial

En el pequeño pueblo italiano de Viganella ya brilla el sol. Y lo hace gracias al Encuentro de la Luz, un proyecto desarrollado en colaboración con la ciudad española de Huelva, que permite a la localidad alpina recibir en invierno la luz del sol que se refleja en un espejo colocado en la montaña.

El alcalde de Viganella, Pier Franco Midali, confirmó el éxito del proyecto, que ha iluminado los 250 metros cuadrados de la plaza y lo hará cada día, durante un mínimo de seis horas, hasta febrero.

El poblado, con 185 habitantes y enclavado en el valle de Antrona, en los Alpes italianos, tiene enfrente una cadena montañosa que le bloquea la luz del sol del 11 de noviembre al 2 de febrero.

La solución se ha encontrado en una estructura de 11 toneladas que sostiene un espejo de 40 metros cuadrados de superficie. Está colocada en una de las montañas, a altura superior a los mil metros sobre el nivel del mar, que hace posible la proyección de luz solar a la comunidad

¿Será el primer paso de Google (mire esto) para dominar al mundo?

EXITOSO DESPEGUE DEL SUPERSONICO NACIONAL

Esta mañana en Allende
EXITOSO DESPEGUE DEL SUPERSONICO NACIONAL

Esta mañana, el nuevo logro de la aeronáutica chilena, realizó su primer vuelo de pruebas sobre el Aeropuerto Internacional Lenin. La Presidenta Marín, aplaudió el nuevo logro de la cooperación tecnológica con la Unión Soviética.

Santiago, Chile. Enero 1984.

Ante un expectante y selecto grupo de espectadores, entre los que se incluían las principales autoridades del país, el ENAER Sukhoi TN-101 Llaima realizó su primer vuelo de pruebas. Exactamente a las 9:30 de esta mañana, la gigantesca nave, propulsada por cuatro turborreactores Kolesov RD36-41, rugió a través de la pista principal del Aeropuerto Internacional Salvador Allende (ex Pudahuel) para luego elevarse y realizar una serie de maniobras alrededor de Santiago, por aproximadamente 30 minutos. Durante las pruebas, el espacio aéreo de la ciudad, estuvo cerrado para vuelos comerciales y militares por motivos de seguridad nacional. A lo largo de todo su trayecto, el Llaima fue acompañado de dos cazas escolta Mig-25 del grupo 7 de la Fach.
Construido por la Empresa Nacional de Aeronáutica, en colaboración con la compañía soviética Sukhoi, el TN-101 fue desarrollado como una variante comercial del exitoso bombardero trisónico SU-100/T-4. Cuando comience sus vuelos regulares, el Llaima podrá llevar 120 pasajeros a más de dos veces la velocidad del sonido a través de las rutas Santiago-Beijing, Santiago-Moscú y Santiago-La Habana. De acuerdo a los planes de ENAER, el primer pedido de 15 aeronaves, debiera estar listo a mediados de 1986, entrando de inmediato en operaciones con Lan Chile y Aeroflot. El exitoso debut del primer transporte comercial supersónico nacional, pone a nuestro país en la vanguardia de la tecnología aerospacial, constituyendo junto al Tupolev TU-144, una notoria victoria de la tecnología aliada soviética, sobre fallidos intentos similares como el norteamericano Boeing 2707 o el Concorde, Anglo-Francés. La Presidenta…

Bye bye Boris

Algunos dicen que Boris Karloff no murió, que de alguna forma logró la inmortalidad. También dicen que al poco tiempo se arrepintió de haberse condenado a una vida sin fin y que deambula por el mundo, angustiado, en busca de la Muerte. No le di mucha validez a estos rumores hasta el 16 de octubre de 1981. Ese día subí al metro, el vagón que me tocó tenía la luz cortada. El tren arrancó. Intenté ajustar mis ojos a la oscuridad y me apoyé contra unas de las puertas corredizas. Vi una sombra en un rincón, era grande, imponente. No pude dejar de mirar la forma negra. Un haz de luz cruzó su rostro. Lo reconocí. Fijó su mirada en mí. Quedé paralizado…
Se acercó. A centímetros de mi cara. Pude sentir la aspereza de su aliento… era gutural, grave, profundo.
Antes de que pudiera reaccionar, la figura se alejó con violencia, emitiendo un gruñido desolado, entró al vagón contiguo… gritos lejanos.
Esa tarde, los militares cerraron los túneles del metro. Dicen que lo capturaron, que intentaron matarlo. Fracasaron. Dicen que lo encadenaron para que no pudiera escaparse. Dicen que encontraron una solución. Dicen que el General lo canibalizó y que las carnes inmortales del monstruo se retorcieron en el vientre del antropófago. Dicen… que aún sigue contorsionándose en sus cenizas.
Sí, sé… son rumores, pero ya no desconfío tanto de lo que se dice por ahí.

10 años de la muerte de Carl Sagan

carlsagan.jpg

Vía Boing-boing.

(…) el 20 de diciembre de 2006 marcará el décimo aniversario del fallecimiento de Carl Sagan. En su honor, estoy organizando una blog-a-ton en su memoria (…) Si eres un fan de Sagan con un blog, puedes participar posteando algo relativo a él. Leyendo o releyendo un libro y comentándolo; discutiendo sobre las cosas que hizo que te hayan influenciado; pontificando sobre alguno de los muchos temas en que se interesó (SETI, astronomía, pensamiento crítico, historia de la ciencia, inteligencia humana), o postea algo completamente sorprendente.

Fuente: Joel’s humanistic blog.

Aunque tengo algunos de sus libros en alguna parte de mi biblioteca sería completamente un error decir que Carl Sagan llegó a mí por alguno de ellos. Nada más decir Cosmos es para mí un poderoso meme que gatilla recuerdos y sensaciones. Éste es mi homenaje.

Porque estaba en la escuela cuando Canal 13 televisó el primer episodio de Cosmos y el impacto fue inmediato. Porque creí, en mi inocencia, que al fin se acababa esa pesada atmósfera de los 1970’s. Si no me equivoco, 1982 fue uno de los primeros años en que la ley obligaba a los canales de la televisión chilena a exhibir una hora de programación cultural, los días jueves, después del noticiero; los regímenes autoritarios son demasiado eficientes en estas cosas. Era algo tan nuevo que casi nadie estaba preparado y se tuvieron que comprar series envasadas para cubrir el hoyo. No me acuerdo qué tenía Canal 7 (¿Informe Especial?), pero Canal 11 competía con un excelente programa sobre física producido por la BBC (creo) que tenía el mismo acercamiento ameno que Cosmos, pero ganó el último. Ya había visto El Ascenso del Hombre, de Jacob Bronowski, en la que se basó la serie de Sagan, y repetir la experiencia era algo que buscaba desde hace un tiempo. Todos los episodios estaban presentados y rematados por Hernán Olguín, que luego, con el impulso creado por la serie, iniciaría su serie Mundo. Carl Sagan era un anfitrión lleno de energía y entusiasmo por la ciencia, la historia y todo lo que se le cruzara. No por nada el subtítulo de la serie era “Un viaje personal”. O sea, cabía todo lo que una vida de científico podía dar. El doblaje al castellano también tenía su carisma con esa voz cálida que te llamaba a irte por la Biblioteca de Alejandría. Fueron catorce episodios que me atrapaban al anochecer y me tensaban como una cuerda de guitarra. Las intensas escenas que recuerdo se mezclan con episodios de la vida personal. Un planeta reciclado completamente por su civilización. La grotesca nariz de oro y plata de Ticho Brahe. Los furiosos cangrejos heikegani. Percival Lowell y sus estrambóticas teorías sobre una moribunda nación marciana. El disco de oro de la Voyager llevando los sonidos de esta Tierra. Los cataclismos violentos y estelares de seres inmutables como las estrellas. Los cachos diabólicos de la Luna y un grupo de monjes asustados hasta el alma. Por último, la nave de la imaginación que era simplemente un diente de león echado al viento. Soñaba con subirme a ella.

Nunca fue un tipo muy apreciado en la línea dura de la ciencia. Todo eso de la divulgación solía ser para investigadores de medio pelo. La verdadera ciencia se crea en los laboratorios, en la dureza de los años de soledad y porfía, lo cual es cierto. Pero no menos cierto es que alguien tiene que llevar esa especie de fuego de los dioses a los mortales como uno, que creen todavía que los motores funcionan con cien enanitos musculosos. Cuando uno se da cuenta que todo es una metódica observación y plantearse las preguntas correctas ya no parece tan difícil de entender. Sagan lo hacía más fácil aún porque mezclaba los datos más difíciles con curiosidades y ejemplos. Pero era un científico de tomo y lomo, y lo demuestran sus estudios sobre microondas -aplicable a la superficie venusina- la exobiología, sus contribuciones al programa Mariner, entre otros. Y humano también, en serio, porque tenía el ego suficiente para meterse en la televisión y salir bien parado. Era un agnóstico y escéptico acérrimo al punto de convertirlo en un enemigo formidable y fundamentalista. Se casó tres veces, la última vez con Ann Druyan, con quien mantuvo una relación de amistad y colaboración previa de veinte años. Lo más polémico de él quizás fuera su preferencia por la marihuana que, según él, le ayudaba a trabajar mejor en sus proyectos.

Sagan también incursionó en la ciencia ficción con su novela Contacto. Su cercanía con el género se nota en todos sus libros, con la especulación de alto vuelo que se permitía, y desde la infancia con las portadas de las revistas pulp, coloridas y sugerentes de otros mundos. Ya lo demostraba participando del proyecto SETI, que buscaba vida inteligente en el Universo. Son muy vívidas, por ejemplo, las poderosas imágenes que describía sobre la vida en las capas superiores de Júpiter con esos organismos flotantes depredados y depredadores. Para el caso de Contacto, lo vapulearon bastante en la crítica, y luego salió una versión cinematográfica edulcorada al extremo (¡que le valió a Jodie Foster galardones a destajo, mientras Sagan se moría al mismo tiempo! Ironías de la vida). Cuando la leí ya venía advertido: malos personajes, escenarios de cartón, ideas sin calentar. Pero estaba blindado de todos esos comentarios y no solo la disfruté, sino que sinceramente pensé –pienso- que no fue para nada un escritor de ficción desdeñable. Porque la protagonista principal está bien cimentada en un conflicto con el padre, porque la trama tiene suficientes aristas interesantes que se van cerrando en forma satisfactoria, porque las ideas me volaron la cabeza. Quizás el pecado de Sagan fue ser Carl Sagan, un nombre demasiado grande.

Como corolario solamente decir que su hijo Nick ha tomado este nicho para sí y parece que la va bien. Ha terminado una trilogía (Everfree, Idlewild, Edenborn) y supongo que no debe irle mal como para tener pensado seguir escribiendo ficción.

Cosmos me marcó. No fui el único. Conversando con diferentes personas sin nada en común, y dirigidos por la teoría del Caos, desembocamos en esa serie y en las experiencias que vivimos alrededor de ella. Tampoco es que sea algo generacional, la ciencia les interesa a unos pocos, aunque la forma en que la presentaba Cosmos era atractiva y novedosa. Pero, en unos más y en otros menos, cuando surgía la melancólica música de Vangelis atravesando la galaxia, se nos aceleraba el pulso. Y entonces irse en la nave de la imaginación, durante catorce semanas, fue obligación. Al otro día, buscaba a alguien para comentarla en la escuela, aunque no la hubiera visto, aunque la detestase.

Me acuerdo que la noticia de la muerte de Carl Sagan (1996) llegó en la última semana de uno de los últimos encuentros de Ficcionautas Asociados. En la mesa de clausura, cuando me tocó hablar, lo relaté al público y de inmediato me di cuenta del error. Ojala hubiera traído un grillo que me hiciera cri-crí. Quizás sea mejor así, como un código de identificación entre los que la vieron ese 1982 (?), un guiño exclusivo y juguetón hacia la infancia moribunda y la prepubertad, y las ganas de querer conocer, explorar, contenerlo todo de una edad inquieta. Carl Sagan forma parte de un imaginario, no colectivo, pero lo suficientemente amplio para que dos personas de universos paralelos puedan compartir. Si es cierto que existe una Tierra paralela, en la misma órbita y al otro lado del Sol, me gustaría imaginar que Sagan sigue vivo allá, haciendo más episodios de Cosmos, escribiendo más libros de ciencia y ficción. En un pub con una pinta de cerveza, discutiendo por qué debería existir un artefacto como Dios, con ese otro superhéroe que fue Hernán Olguín. A los dos les debo parte de mi sentido de la curiosidad y la maravilla.