Cuando el 4 de octubre de 1957, la ex Unión Soviética puso en órbita al Sputnik I, el primer satélite artificial de la historia, se dio inicio a la conquista del Espacio, epopeya científico tecnológica que permitió materializar un sueño que desde tiempos inmemoriales había embriagado la imaginación de la humanidad: Viajar hacia las estrellas.
En los comienzos de la conquista del Cosmos las expectativas eran muchas, en sólo una década después de los primeros lanzamientos de satélites, se pudo llegar a la Luna y era natural que el futuro se vislumbrara promisorio. Continue reading «La llegada del turismo espacial»



Aunque bastan los ojos (y en lo posible una noche oscura alejados de la ciudad), para maravillarse con la inmensidad del cosmos, es del todo evidente que sólo gracias al uso de instrumentos de observación (tecnologías ópticas y no ópticas) es que ha sido posible alcanzar el nivel de conocimientos que actualmente tenemos acerca del Universo. Esto se confirma al estudiar la historia de la ciencia, en donde se puede identificar, como un punto clave en el desarrollo de la astronomía, a la primera observación telescópica que realizó 

Sintió que la gente de las luces venía por él.
1. Puede muy bien ser que Álvaro Bisama (1975) mezcle peras con manzanas, y que esto no sea agradable de leer. También puede ser que esa sea su gracia: unir peras con manzanas por medio de injertos genéticos practicados por un científico loco, y que cuente la historia, que esa historia sea el texto que escribe –o un apartado mínimo, que se une como una cadena imposible a otros tantos eslabones también imposibles.