Punto de inflexión: En marzo de 1951 Ronald Richter comunicó al presidente Juan Domingo Perón que los experimentos habían tenido éxito y el gobierno argentino anunció:
«El 16 de febrero de 1951 en la Planta Piloto de Energía Atómica en la Isla Huemul, de San Carlos de Bariloche, se llevaron a cabo reacciones termonucleares bajo condiciones de control en escala técnica.»
-“Perú, Nueva sede del Peronismo”-Leyó el general en el periódico- ¿Qué te parece? El juego de palabras de Peruanos- Peronistas era algo que se veía inevitable, che. Continue reading «No tenemos nada que envidiar, querido»
Estuvo a punto de volarse los sesos a veinte metros de haber salido a cumplir su última misión. No lo hizo. No podía ser tan débil e imbécil. Tenía que vengarse de una vez, y no le importaba ni un comino la promesa de los mil años de paz. Se los podían meter por donde quisieran.
– Daniel, llévate a tu hermana en la camioneta…
Solía frecuentar la librería, además de por todas las rarezas inconseguibles, por el café y la comodidad de los sillones. Al entrar uno se encontraba con aquel espacio tan acogedor, la mesa de novedades, la bandeja con galletitas, los asientos con almohadones mullidos, y el mundo parecía cancelarse de repente, ahogado el ruido de la calle por las últimas reverberaciones de la campanilla de la puerta. Entonces saludaba al librero, elegía dos o tres libros y me sentaba a examinarlos en paz. Solía pasar por allí los viernes por la tarde, a veces –las menos, porque no me caían bien los clientes que iban ese día- los domingos pasadas la una o una y media, en los últimos remanentes de la Feria.
Mañana: alguna tontería en la NASA. Mil años más tarde: la revelación, el golpe. Un universo infinito, sondas y telescopios olfateando entre las estrellas. Hombres en Marte, en Ganímedes, en la negrura. Ciudades y plataformas, granjas solares, Mundos Anillos en obras, la Luna muerta, la Tierra herida, y sin embargo vida. Vida con un pero: sólo la nuestra. Ninguna respuesta desde ningún sitio, nada de nada. Solos. Completamente solos. Una bacteria en un asteroide, de vez en cuando, ¿pero y las naves? ¿Los invasores? ¿Los dioses, los monstruos y los misterios? Polvo y red shifting, y nada más. Resulta al cabo que somos los primeros. Las ruinas y las civilizaciones perdidas, los mensajes que flotan galaxia adentro, galaxia afuera, son todas nuestras, son todos nuestros. Depresión y existencialismo. Solos, solos, solos. Vacío y agujeros negros. Saberlo todo, y para nada. ¿Cuántos millones de años, hasta que haya otros? ¿Cuánto se puede esperar por alguien?