¿Hacia una evolución 2.0?

Me van a disculpar la ordinariez, pero estoy hasta los huevos de documentales de astronomía. En serio.
No me malinterpreten, me gustan mucho, pero modestamente ya me conozco la trama de todos y ahora más bien ejercen una influencia «actualizadora» en mí (onda, poniéndome al día cuando aparecen descubrimientos nuevos), mientras que en un novato la influencia ejercida es «cautivadora» (onda, para recién atraer al curioso, cosa que yo ya no necesito :)). Continue reading «¿Hacia una evolución 2.0?»

¿La literatura fantástica puede caer en malas manos?

Confieso que la noticia sobre el intento de censura de Harry Potter, que leí hace ya poco más de dos años, en su momento me pareció tan graciosa como a la mayoría de quienes comentaron, pero ello no me quitaba una sensación de gato encerrado. Y es que dicha denuncia fue interpuesta por una madre preocupada por el contenido de brujería de la saga, pero no me atreví a concluir cuál era la preocupación real de esa mujer, porque curiosamente Harry Potter (por nombrar sólo un caso) ha sido motivo de censura en dos bandos popularmente antagónicos: la ciencia y la religión. Continue reading «¿La literatura fantástica puede caer en malas manos?»

El fin del mundo se acerca

El 28 de marzo de 2008 siete mujeres de la secta Verdadera Iglesia Ortodoxa Rusa decidieron deponer su autoencierro en una cueva al Sur de Moscú. El enclaustramiento había durado cinco meses, y aún quedaba una treintena de personas que rehusaba abandonar el lugar. ¿La razón? La misma que motivó su ingreso allí: según el grupo, el mundo se acabaría en mayo de 2008. Un autoproclamado profeta les había anunciado este evento basándose en su personal decodificación de la Biblia. Continue reading «El fin del mundo se acerca»

Zetética y la desmitificación científica de las supersticiones

Henri BrochHenri Broch, Doctor en Ciencias, es el fundador del Laboratorio de Zetética de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Niza. Es autor de más de 150 publicaciones y 6 libros. Uno de ellos, “Conviértase en Brujo, conviértase en sabio”, co-escrito con el premio nobel de física George Charpak, fue el que nos introdujo en el concepto de Zetética, disciplina que promueve el pensamiento escéptico al analizar y desmitificar científicamente los fenónemos paranormales, pseudociencias y supersticiones de toda clase.

Para indagar más sobre la Zetética (que en griego significa búsqueda, inspección) contactamos a Henri Broch, quien amablemente accedió a responder las interrogantes que le planteamos. Sus respuestas y reflexiones, a continuación. Continue reading «Zetética y la desmitificación científica de las supersticiones»

Pie Grande y el marciano

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Recientemente causó gran revuelo en Internet una de las imágenes captadas por Spirit, un robot que explora Marte desde 2004. La noticia, recogida por muchos medios de comunicación, es que esta imagen podría contener prueba de la existencia de vida en Marte. No vida a nivel celular sino que derechamente organismos humanoides. En concreto la imagen muestra una figura que, vista con un poco de imaginación, puede interpretarse como un organismo bípedo caminando por la superficie marciana. En realidad, seamos francos, requiere bastante imaginación, pero da igual. Llevando al límite estas interpretaciones, hay quienes han querido ver, ya bastante alicaído como mito terrestre, a un pariente de Pie Grande en esta foto.

El fenómeno de adscribir formas familiares a elementos aleatorios (las manchas de humedad, las nubes, la llama de una vela, las rocas en un paisaje desértico) es bien conocido y se llama pareidolia. Este fenómeno origina muchos comentarios sobre supuestas manifestaciones sobrenaturales, en que se han reportado rostros o escenas más complejas emergiendo, por ejemplo, en las paredes de un edificio antiguo. La posibilidad de obtener una imagen medianamente convincente aumenta mientras más imágenes se examinen, mientras más concesiones se hagan a la escala y color de la imagen, mientras más flexible seamos con su grado de detalle, entre muchos otros factores. Las imágenes enviadas por Spirit son varios miles, por lo cual no es sorprendente que en alguna nos hallemos con el ocasional marciano de mediana calidad. Eso a primera vista, claro, pero ahora que sabemos de la pareidolia, démosle una mirada más analítica a la imagen.

Como pasa a menudo con estas imágenes «paranormales» hay cosas clave que sus partidarios no informan al público. La primera es que esta foto es un pequeño detalle de una foto mucho mayor. Al examinar la foto completa vemos que ésta incluye parte del equipo de Spirit. Con esa referencia, resulta obvio que estamos hablando de algo que está a no más de un metro de la nave, ¡y que por tanto debe tener alrededor de 5 cm de alto! Ya eso me parece suficiente indicación de que se trata de una piedra, pero hay más: La cámara con que está equipada Spirit no es una cámara como las que usted compra en las tiendas de retail, con un boton que aprieta y obtiene una foto en color. Las cámaras para uso astronómico son monocromáticas, de modo que esa imagen en color es una fotocomposición de tres imágenes en blanco y negro. Veámoslo así: Spirit toma una foto con un filtro rojo, la guarda; luego toma una foto con un filtro verde, la guarda; finalmente toma una foto con un filtro azul, la guarda. Esas imágenes son combinadas en la Tierra para generar una imagen en color. El punto importante es que se toman tres fotos para obtener una, y el proceso de tomar tres fotos lleva tiempo. Si algo se estaba moviendo en ese paisaje, como sería el caso si un descuidado marciano de 5 cm hubiera decidido pasear cerca de nuestro robot, entonces se habría movido entre una foto y otra, y habríamos obtenido un retrato también movido, lo cual no ocurre.

Sí, estamos en la Vía Láctea

Via láctea + Galaxia de Sagitario
Fui alertado sobre la publicación en varios medios online de artículos refiriendo un extraordinario descubrimiento científico: nuestro Sistema Solar sería en realidad parte de una galaxia enana llamada Sagitario, la cual estaría siendo devorada por la Vía Láctea, que es la que hasta ahora hemos considerado nuestra galaxia madre. Un artículo publicado en emol.com menciona un par de universidades, una revista científica y un astrónomo avalando este hallazgo. Sin embargo no es cierto. Un rápido rastreo por Internet revela que la información fue copiada entre varios medios de comunicación, cada vez alterando algunos detalles, como el nombre del investigador a cargo, o la revista en que el descubrimiento habría sido publicado (por ejemplo en emol.com se dice que apareció en Astrophysical Journal, mientras en otros medios se asegura que fue en Science). Aunque tales investigadores y revistas existen, los hechos reportados son falsos.

La universidad que más se repite como supuesta responsable de este descubrimiento es la University of Virginia. Una visita a su sitio web institucional revela lo lo que traduzco a continuación:

Si estás visitando este sitio web porque has escuchado reportes noticiosos falaces respecto a que el Sol es parte de la galaxia enana Sagitario:

  1. ¡No creas todo lo que lees en la web!
  2. Si eres un/a periodista, ¡por favor sigue estándares periodísticos tradicionales y verifica tus fuentes y hechos! (Si otras agencias de noticias supuestamente confiables hubieran seguido estos principios básicos, probablemente no estarías malgastando tu tiempo ahora, investigando esta noticia ilegítima).
  3. El sitio web http://www.badastronomy.com/bablog/2007/06/27/is-the-sun-from-another-galaxy responde razonablemente a la desinformación que ha hecho circular esta “historia noticiosa”

La noticia se ha esparcido por otros sitios web, en los cuales se han postulado bizarras asociaciones de hechos. En uno se asegura que ésta es la verdadera causa del calentamiento global. En otro se afirma que esto explica el fin del calendario maya. Y un inverosímil etcétera.

Para quienes quieran saber por qué las aseveraciones de aquel artículo no pueden ser correctas, los siguientes son algunos hechos clave, reseñados en el sitio web Bad Astronomy:

  • El artículo señala que este descubrimiento explicaría el ángulo con que vemos la Vía Láctea en el cielo. En realidad eso no ha sido en ningún momento un misterio. El ángulo de la Vía Láctea en el cielo tiene que ver con la inclinación del eje de la Tierra respecto al plano del Sistema Solar y no tiene ninguna importancia para decidir a qué galaxia pertenece nuestro Sol. Por el contrario, el movimiento del Sol, que sí importa para llegar a una conclusión, ocurre claramente en el plano de la Vía Láctea y no en el plano de la galaxia Sagitario.
  • La composición de las estrellas en la galaxia Sagitario es mucho más baja en hierro que el Sol, por lo que si éste fuera parte de esa galaxia sería una estrella excepcional. Por otro lado, la fracción de hierro de las estrellas en la Vía Láctea es en algunos casos más alta y en otros casos más baja que el Sol, de modo que en la Vía Láctea el Sol es una estrella común y corriente.
  • El Sol se halla casi en el centro vertical exacto de la Vía Láctea. Si el Sol formara parte de la galaxia Sagitario la posibilidad de que la intersección entre las dos galaxias nos dejara justo en esta posición es extraordinariamente baja. Si el Sol forma parte de la Vía Láctea, en cambio, esto es lo que esperamos que ocurra con la mayoría de las estrellas.
  • Las asociaciones entre este supuesto descubrimiento astronómico y un fenómeno como el calentamiento global no tiene base alguna. Baste decir que no todos los planetas se están calentando en el Sistema Solar.

A continuación la nota de prensa original:

Estudio afirma que la Tierra no está en la Vía Láctea

Viernes 29 de Junio de 2007, 15:35. El Mercurio Online [screnshot]

Vea la Galaxia de Sagitario
SANTIAGO.- Un grupo de astrónomos estadounidenses que analizó las emisiones infrarrojas en el espacio, llegó a la conclusión de que la Tierra no se encuentra en la Vía Láctea, sino en una galaxia más pequeña, llamada Sagitario.

De acuerdo al estudio encabezado por la Universidad de Massachussets, nuestro Sistema Solar tiene su verdadero origen en esta galaxia, la cual está siendo «engullida» por la Vía Láctea.

Esto, dicen los especialistas, explicaría porqué la vía Láctea se observa con una inclinación desde nuestro planeta, indica el diario mexicano El Universal.

Michael Skrutskie, coautor del estudio y profesor de astronomía de la Universidad de Virginia –que también participó en los análisis-, sostiene que «pertenecemos a otra galaxia en proceso de fusionarse con la Vía Láctea, ahora por fin sabemos el origen del misterioso ángulo que aparece cada noche en el cielo».

Este proyecto de investigación, que publican sus conclusiones en Astrophysical Journal , es el primero en ‘mapear’ toda la galaxia enana de Sagitario, además de mostrar con gran detalles como sus fragmentos envuelven y atraviesan a la Vía Láctea.

El mapeo infrarrojo, que fue realizado en 2003, muestra que Sagitario es diez mil veces más pequeña en masa que la Vía Láctea, por lo que está siendo estirada, separada y absorbida por ésta.

Supercomputador en operación

En el estudio se empleó un supercomputador para clasificar cerca de 50 mil millones de estrellas, lo cual sirvió para crear un mapa estelar que muestra el Sistema Solar de la Tierra justo en la intersección en la que ambas galaxias se están uniendo.

Previo a este análisis, los astrónomos sólo habían localizado algunas estrellas dispersas de la galaxia enana Sagitario, que fue descubierta por investigadores británicos en 1994.

Conviértase en brujo, conviértase en escéptico

Conviertase en brujo, conviertase en sabioCuando uno mira la tapa de Conviértase en Brujo, Conviértase en Sabio (Georges Charpak & Henri Broch), pareciera estar en presencia de un libro de autoayuda mística de contenido muy cuestionable. Las palabras “Brujo” y “Sabio” resaltan por sobre todo, a la vez que aparece la fotografía de un tipo en actitud misteriosa.

Nada más alejado de la realidad.

Conviértase en Brujo, Conviértase en Sabio en un libro de difusión científica que tiene como objetivo el quitarle el aura de magia y misterio a muchos fenómenos que parecieran ser de otro mundo, pero que un análisis objetivo demuestra que son más pedestres de lo que uno pensaría. La idea es que utilizando razonamiento lógico, principios físicos, sentido común y simples estadísticas se puede demostrar que las supersticiones y los fenómenos paranormales tienen su origen únicamente en nuestra mente y sociedad, y no en hipotéticos espíritus ociosos, por poner un caso, cuya única razón de existir es la de atormentar a las personas.

Si bien estamos hablando de un libro cuya edición en el mercado local data al menos del año 2003, es un tema que no pierde actualidad. Siendo nuestra sociedad bastante crédula y ávida por los sensacionalismos; que encuentra en el horóscopo el curso de acción del día; en donde videntes de toda clase, parasicólogos, ufólogos y adivinadores desfilan por los matinales de la tv y muchas veces hasta logran portada en los diarios; estando nuestra sociedad, en definitiva, impregnada por supersticiones y rodeada de literatura seudocientífica, un libro que eduque y ejercite nuestra capacidad de escepticismo es algo que de verdad se agradece.

El libro es pródigo en ejemplos prácticos, que uno hasta puede ejecutar y que realmente funcionan. Como ejemplo, desmitifica al horóscopo. No son pocas las personas que “realmente” leen su destino en aquella colección de generalidades sin nombre ni apellido que publican a diario casi todos los periódicos y revistas. Los autores demuestran efectivamente que los consejos del horóscopo están escritos de modo tal que cualquier conjunto de consejos son aplicables a cualquier persona, independiente del signo zodiacal. En definitiva, concluyen, el horóscopo funciona, pero eso no implica que el destino de las personas esté codificado en el movimiento de los planetas o que sea producto de la acción de fuerzas misteriosas. Lo llaman Efecto Pozo: conforme más vago o general es el mensaje, más gente está inclinada a aceptar ese mensaje para sí.

Otro ejemplo. Todos sabemos que nadie es infalible. Es decir, todos podemos equivocarnos. Pocas cosas son más obvias que ésta. Pues bien, si nadie es infalible, sucede también que nadie es absolutamente falible, vale decir, que se equivoque siempre. Un astrólogo, en particular, puede predecir y predecir hechos y por puro azar puede apuntarle a algún pronóstico. Lo realmente extraño sería si se equivocara siempre o bien si siempre acertara. El punto es que normalmente uno nunca se entera de los fracasos de los pronósticos astrológicos, o bien son olvidados rápidamente. Por el contrario, sus éxitos son publicitados en los medios de comunicación, a grandes letras, siendo en ocasiones titulares en algunos periódicos amarillistas. La gente sólo se entera de los éxitos puntuales y absolutamente casuales, pero no de los numerosos (y obviamente silenciosos) fracasos. El resultado, desde el punto de vista de un observador aleatorio, es que el astrólogo luce un inquietante poder metahumano de adivinación. Un argumento similar, utilizando conceptos estadísticos sencillos, esgrimen los autores para explicar las curaciones milagrosas. Y los ejemplos continúan.

Por supuesto, este libro no pretende revolucionar las creencias religiosas de nadie. Simple y humildemente pretende inculcar un mínimo de pensamiento escéptico, característica que no sólo puede ser utilizada en inquietudes intelectuales de sobremesa, sino que también en situaciones prácticas: descubrir y alejarse de embaucadores, por citar un ejemplo.

En la escala de 1.0 a 7.0, Conviértase en Brujo, Conviértase en Sabio tiene nota máxima.

Título Original: Devenez sorciers, devenez savants
Traducción: Núria Viver Barri
1ª edición: enero 2003
© Éditions Odile Jacob, 2002
© Ediciones B, S.A., 2003
ISBN: 84-666-1086-2002

nota: versión original de un fragmento publicado originalmente en ArgoNavis #12, pág. 14.