No nos podemos quejar. Como en la mejor época jamás anticipada, la fantasía de nicho propio ha tomado la batuta del mercado literario local y parece apretar el puño sin recato. Entre las descabelladas obras de conspiraciones, zombies, naves y leyendas que varios autores chilenos se han encargado de hacer proliferar con reconocido entusiasmo, una vertiente más silenciosa saltó dos escalones y tomó el protagonismo que merece: las ucronías, formato que eligió Jorge Baradit para la última locura empastada tras su ya famosa Ygdrasil.
por Francisca Solar
Las también llamadas novelas de «historia contrafactual» juegan con la valiosa pregunta del «¿qué hubiera pasado si…?», y nos dan la oportunidad de fantasear con el camino que nuestro destino espacio-temporal no tomó. Eso es Synco. Mientras la memoria colectiva sigue sin querer despercudirse de los violentos y archievocados episodios de septiembre de 1973, Baradit nos concede en su relato retrofuturista un Chile sin heridas tras un golpe frustrado, con un Allende superviviente y coherente, y lo que es más, dispuesto a dar el vamos a un proyecto inédito en la historia de las redes virtuales. El sueño de un Silicon Valley que, tras la imposición del gobierno militar, nunca vio la luz, pero que la ficción de Synco ha sido capaz de resucitar con datos tan fidedignos que un despistado, o un desmemoriado no se atrevería a poner en duda.
Para los muchos lectores ya cansados de la literatura sesgada con tintas políticas, vaya una advertencia de alivio: Synco está tan bien aferrada a su género y tan pensada al dedillo que logra sostenerse por sí sola, incluso sin necesidad de un piso en la resquebrajada historia civil de este país. La ucronía sale airosa, no por su fidelidad con los aspectos que toma de la realidad, sino por su capacidad de repensar esos sucesos y estirar el elástico del tiempo hasta donde la mayoría no había querido mirar. «Lo que no fue» es tan palpable que da miedo, o impotencia, en una lucha entre el azar y las decisiones que gustaron a unos y enterraron a otros. Una novela con trailer que tiene el perfecto potencial de seducir a cualquier color o tendencia; es el delirio -uno bizarro, entretenido, sicodélico- de un CyberChile que pudo ser para todos.
Fuente: Cultura de La Tercera. 18 de octubre de 2008. (Descargar págs. 4 y 5)
Al leer esta frase pareciera que estámos viviendo un boom de literatura fantástica en Chile. ¿Qué otros libros de corte fantástico se han publicado desde Ygdrasil en Chile que hayan tenido similar repercusión? ¿Cuales se publicarán este año?
La batuta del mercado lietario local la tiene Jorge y lo ha logrado en base a su talento y trabajo. Si nadie más puede lograr lo que él, pues supongo que simplemente no está a la altura de las circunstancias y debe contentarse con autoediciones que ni la familia te compra (me incluyo en esta última categoría).
Felicitaciones a Jorge, espero estar en primera fila para que me firme mi ejemplar de Synco. Pero no me digan que hay un «boom» de literatura fantástica en Chile. Lo que hay es un autor sumamente original y con cojones llamado Jorge Baradit y punto.