La Raiz Cuadrada de Egan

Días atrás fueron anunciados los nominados para el premio Hugo 2008 (para trabajos realizados en el 2007), y en la categoria «Mejor Cuento» destacan dos aportes del australiano Greg Egan, «Glory» y «Dark Integers». Hace seis meses escribí en mi blog personal una reseña de acerca de estas mismas historias y por lo tanto he considerado pertinente ahora publicar este articulo también en Tau Zero.

Si hay un autor de ciencia ficción al cual le vienen bien los títulos matemáticos, ese es Greg Egan. No solo porque es, de hecho, matemático (y programador), sino porque muchas de sus obras tienen relación con esta disciplina. Historias donde las matemáticas son un verdadero protagonista. ¿Suena aburridor e insípido? Todo lo contrario. Son relatos realmente apasionantes y llenos de una inesperada vitalidad y colorido.

En estos días me he topado precisamente con dosde los últimos trabajos de este autor australiano; “Dark Integers” (Asimov’s) y “Glory” (The New Space Opera).

Es que hace una semana atrás adquirí el mas reciente número de Asimov’s SF Magazine, como siempre en la librería Kinokuniya de Yoyogi. El primer relato del volumen era “Dark Integers” (Enteros Oscuros), una continuación de “Luminous”, otro cuento de Egan publicado en la misma revista a mediados de los noventa.

Aquí nos encontramos con conocimientos prohibidos, sociedades secretas, y el ominoso contraste entre un mundo placido y predecible, y la repentina incertidumbre asociado al hecho de que 2 + 2 ya no sean 4. Porque claro, tal hecho vendría a remecer los mismísimos cimientos sobre la cual esta construida la realidad material, y de eso es precisamente de lo que trata esta historia.

Algunos días pasaron antes de que las responsabilidades mundanas me permitieran un merecido descanso y la posibilidad de aventurarme con algo mas de ciencia ficción. Fue entonces que decidí continuar con la lectura largamente demorada de “The New Space Opera”, la notable antología de Dozois y Strahan. Con anterioridad ya había disfrutado de los primeros cuatro cuentos. Para mi sorpresa, cuando abri el libro dispuesto a comenzar con el quinto, me di cuenta que se trataba de “Glory” (Gloria), del mismo Egan.

Y de nuevo las matemáticas. Esta vez arcanos teoremas capaces ya no de alterar la realidad en términos físicos, sino que subjetivos. Axiomas peligrosos, cuyo mero conocimiento puede hacer que civilizaciones enteras desaparezcan al ser modificadas fundamentalmente sus percepciones sobre el sentido de la vida y sus motivaciones para continuar existiendo.

Así, tenemos dos cuentos, sólidos, atractivos, envolventes. Hard science fiction de la mejor escuela. Dos bazas con las que Egan podría disputar más de algún reconocimiento a la hora de repartir méritos para lo hecho durante el 2007.