EL PELIRROJO

-No, es que no puede ser posible…
-Pero huevón, estás viendo la foto…
-Dime que las fotos no mienten, cualquier huevón de diseño de este mismo diario puede armar un truco tanto o mejor que esta cagada de foto.
-Te digo que es real.
-Huevón, no seas paranoico, cómo va a ser real. Míralo, por favor, estamos a noviembre del 2006, la foto está indicada como mayo del 75. Por favor mira ese cadáver, no puede ser el pelirrojo.
-Es idéntico al pelirrojo.
-Y que lo sea… no puede ser no más, no tiene lógica.
-Pero el huevón dijo…
-El huevón decía que había visto dinosaurios. No seas tarado, al idiota lo echaron del diario por loco, no te contagies tú con sus delirios. La foto es falsa, alguien la mandó como broma a la redacción, ni idea con qué propósito. Deja de hablar tonteras y piensa con lógica, el muerto no puede ser…
-El Pato…
-Please… ni siquiera había nacido en la fecha que está indicada detrás.
-Igual es raro que el loco haya desaparecido.
-Desaparecer es una cosa, pero viajar en el tiempo y reaparecer como un cadáver en una fosa de campo de detenidos desaparecidos de hace treinta años es algo muy distinto.
-No sé, es que ni tu, ni el resto de los colegas lo conocieron como yo.
-Quien iba a interesarse en conocer a un tarado como ese, el huevón malgastó su carrera investigando tonteras de Ovnis, fantasmas y huevadas por el destilo. Los jefes le tenían ganas desde que llegó, no lo echaron antes porque les daba pena…
-Decía que tenía un propósito.
-Propósito de chiflado, sería.
-Mira huevón. El Pato Lobos puede haber estado loco, pero no era mala persona. Lo pasó mal en la vida, como tantos, no más. Su matrimonio fue un desastre. El mismo me contó que se casó sabiendo que no iba a funcionar. Un día, con un par de cervezas encima, me confesó que su verdadero amor era un imposible. Borracho me habló de una mina de pelo blanco que vivía en otro lado, que…
-Puro bla bla de huevón depresivo. No tengo nada contra la gente que padece problemas psicológicos, pero me carga los que son enemigos de si mismos. Y el pelirrojo, el Pato Lobos, era de los que viven pegándose en defensa propia.
-Igual fue raro cuando lo echaron.
-Que tiene de raro, el huevón armó un escándalo porque el diario se negó a publicar lo de esos cadáveres de los milicos. ¿Qué quería? Mira, los ideales se acaban cuando uno tiene que educar a hijos y mantener una familia. El Pelirrojo y todos los que trabajamos para el viejo, conocemos la línea editorial del diario. Que no se haga el huevón. ¿Que quería?, que lo felicitarán. El huevón se buscó que lo echaran.
-Ese día hablé con él. Le dije algo parecido, que puchas, que así eran las cosas, que la vida era injusta, que no se podía manipular el pasado, que se yo. ¿Sabes lo que me contestó?
-Pico…
-Que si, que si se podía. Y era como andar en bicicleta, una vez que se aprendía hacerlo no se olvidaba nunca más.
-Huevón cagado del chape.
-No sé, no sé. Y después desaparece sin que nadie vuelva a saber de el y ahora esta foto… Es rara la tontera, en verdad no sé que creer…
-No hay nada que creer, guatón, alguien te está tomando el pelo no más.

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